El Hospital de la Ribera situado en Alzira batió en 2015 un importante récord. Se realizaron allí durante ese periodo un total de 22.456 intervenciones quirúrgicas, cifra que marca el registro histórico en sus 16 años de funcionamiento. Según los datos ofrecidos por el centro hospitalario, en 2015 la demora quirúrgica del Hospital se situó en 42 días, un 40,8% menos que el resto de hospitales de la red pública valenciana, que contaron con 71 días de demora media. Especialidades quirúrgicas como cirugía vascular, cirugía ortopédica y traumatología, cirugía pediátrica, cirugía plástica, cirugía vascular y urología, tuvieron una demora inferior a los 40 días.

En paralelo, y como ejemplo, la tasa de fracturas de cadera intervenidas antes de 48 horas fue de 81,21 en el Hospital de Alzira, mientras que la tasa media del resto de hospitales valencianos alcanzó el 51.24.

Por lo que se refiere a las urgencias, La Ribera atendió en torno a 100.000 urgencias en 2015, de las que solo el 13,94% requirieron de ingreso hospitalario. Según los datos oficiales de la Consellería de Sanitat Universal, un 93,51% de los pacientes fueron atendidos en un plazo de tiempo que se considera adecuado en función de la gravedad, lo que sitúa al Servicio de Urgencias del Hospital de Alzira entre los más ágiles a nivel valenciano, superando en 12 puntos el porcentaje medio de pacientes atendidos a tiempo del resto.

Más de 2.000 consultas al día

Junto a la ágil atención quirúrgica, durante el año 2015, La Ribera atendió más de medio millón de consultas de Atención Especializada, lo que supuso una media de 2.247 consultas diarias. Se hizo posible sobre todo gracias a invertir más de 3,8 millones de euros en infraestructura y tecnología sanitaria. Entre las inversiones llevadas a cabo durante el pasado año, destacó la adquisición de un equipo para administrar braquiterapia de alta tasa de dosis en cáncer de próstata y un equipo de hemodinámica de última generación para el Servicio de Cardiología, así como la actualización y mejora del servicio de Radiología del Hospital de La Ribera.

Según destacó ayer el director médico quirúrgico, José Emilio Llopis, «esta elevada actividad es fruto del modelo de gestión de Ribera Salud, que permite introducir en el sistema sanitario público herramientas que facilitan la planificación de la actividad; una completa cartera de servicios con especialidades complejas como cirugía cardiaca, radioterapia oncológica y neurocirugía, entre otras; la amplitud de horarios ofrecidos a los pacientes, y la potenciación de la Cirugía Mayor Ambulatoria o Cirugía Sin Ingreso, un factor clave a nivel europeo en la gestión moderna de hospitales».