Una de las grandes diversiones de los más pequeños son los petardos. La Policía Local de Cullera ha iniciado una campaña en la que se insta a los niños a extremar las precauciones y ofrece información sobre los riesgos que se pueden correr. A pesar de ser parte de la fiesta, la pólvora es un elemento peligroso y hay que saber manipularla. éstas son las recomendaciones básicas para su correcto uso:

La campaña recuerda la clasificación existente y detalla que los de categoría I (bengalas, bombetas?) están prohibidos a los menores de ocho años. Son de muy baja peligrosidad y se pueden utilizar en zonas delimitadas, mientras que los de categoría II (chinos, voladores,?) se pueden usar a partir de los 10 años. Son de baja peligrosidad, pero se deben disparar al aire libre y en zonas delimitadas. Los «masclets», baterías,?, se pueden usar a partir de los 18 años.

La normativa de la C. Valenciana reduce las edades de la norma estatal sobre los usos de pirotecnia. Para que esa rebaja sea efectiva se necesita una autorización por escrito de los padres o tutores legales. Un menor no puede tirar petardos sólo, siempre tiene que estar vigilado por un adulto.