Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Urbanismo aprueba la declaración de interés comunitario del circuito de karts de Guadassuar

Un empresario francés tiene intención de edificar un centro de referencia para albergar todo tipo de carreras

Urbanismo aprueba la declaración de interés comunitario del circuito de karts de Guadassuar

La Comisión Territorial de Urbanismo de la Generalitat Valenciana ha resuelto conceder la Declaración de Interés Comunitario a la solicitud formulada por la mercantil Car Track Events SL para implantar un centro recreativo, deportivo y de ocio en Guadassuar que albergará, como principal aliciente, un circuito de velocidad para karts. Una vez conseguido la autorización, el proyecto todavía deberá probar que cumple todos los requisitos medioambientales exigibles. Algunos propietarios de terrenos colindantes han presentado alegaciones contra la iniciativa.

El complejo, impulsado por promotor francés afincado en Silla Pascal Hidalgo, se llamará Circuit de la Ribera. La intención inicial de la empresa es invertir cerca de diez millones de euros. El circuito de karts operará con bólidos capaces de alcanzar velocidades de hasta 240 km/h. El centro tiene proyectada una escuela de conducción para niños y adultos e instalaciones asociadas. Se construirá un circuito principal, de 2.000 metros lineales y un ancho de calzada de entre 10 y 12 metros.

Según figura en la memoria explicativa del proyecto, también dispondrá de un circuito de car-cross de tierra con 1.500 metros de longitud de desarrollo y 14 metros de ancho de pista y un circuito para la escuela infantil y de conducción de otros 1.500 de desarrollo y 10 metros de ancho.

Para la gestión de las instalaciones, se construirá un edificio de boxes y taller, un edificio de oficinas y control de acceso, el paddock, la zona de aparcamiento y el edificio existente en la parcela se acondicionará para vestuarios, cafetería-restaurante y almacén. El total de edificaciones ocuparán una superficie de 6.423 m2.

Algunos vecinos han alegado en contra del proyecto al considerar que provoca un importante impacto acústico. La Generalitat admite que ante la ausencia de obstáculos naturales a la propagación, el ruido generado será audible desde un entorno amplio.

Compartir el artículo

stats