Las fallas suponen una fiesta que se vive en la calle. Un grupo de diez residentes del centro geriátrico de Almussafes (entre ellos la Fallera Mayor 2016, la malagueña Rosa Mª Moreno) recorrieron ayer la calle Mayor de la población para visitar los tres monumentos. El coordinador del voluntariado de mayores de la UDP en Almussafes, Lorenzo Domínguez, acompañó a los usuarios de la residencia en su recorrido por los seis monumentos que este año han plantado la Primitiva, la Mig Camí y La Torre. Los visitantes recuperaron fuerzas en la carpa de la Primitiva, donde les sirvieron el típico almuerzo fallero de buñuelos con chocolate.