Durante las vacaciones de Semana Santa ha vuelto a abrir sus puertas el comedor social de Cullera, una iniciativa financiada por el ayuntamiento cuyo objetivo es garantizar la correcta alimentación de los niños pertenecientes a familias de la localidad con escasos recursos. En el mediodía de ayer la concejala de Servicios Sociales, Francesca Ortiz, supervisó en primera persona que todo estuviera en orden para recibir a los 20 escolares que se benefician de esta prestación.

Concretamente, durante los días 29, 30 y 31 de marzo y el 1 de abril, se abren las puertas para servir la comida del mediodía y evitar así que durante este periodo de vacaciones escolares haya niños que no puedan nutrirse como consecuencia del cierre de los comedores escolares.

Es la tercera vez desde que el gobierno local asumió el poder en junio que se abre el comedor social. La primera fue durante los meses de verano y tras el éxito de la iniciativa la concejalía de Servicios Sociales se comprometió a ampliar la prestación a todas las vacaciones escolares.