El presidente de la Asociación Española del Caqui, Vicente Masiá, aprovechó la asamblea anual celebrada en Alginet para lanzar el reto de coordinar la labor de promoción para abrir nuevos mercados y el secretario autonómico de Agricultura, Francisco Rodríguez Mulero, presente en esta junta general, recogió el guante y se comprometió a estudiar «cómo organizamos el futuro de la promoción del producto». Mulero recordó en su exposición que el sector cuenta con dos grandes de núcleos de distribución, por un lado las cooperativas, integradas en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen «Kaki Ribera del Xúquer», y por otra parte los comercios privados, agrupados en esta asociación de ámbito nacional, y comentó que «hay que armonizar esa estructura porque los intereses son comunes».
Masiá fue el primero que abordó el tema en una asamblea en la que en diferentes momentos se aludió a esta doble estructura. «He dicho que tenemos que evolucionar, tanto para que el productor tenga más rentabilidad como si tenemos que unirnos para lograr mercados alternativos, porque si buscas un nuevo mercado no es sólo para el comercio privado, es para el caqui, ya sea cooperativa o comercio, es para todos», explicó Masiá tras la asamblea.
Rodríguez Mulero, por su parte, señaló a Levante-EMV que «no tiene ningún sentido que el segundo eslabón de la cadena no tenga un planteamienteo de búsqueda de mercados común, porque incluso en los cítricos tienen un comité de gestión y un planteamiento común». «Cuando digo armonizar digo que el caqui es un producto único y cualquier actividad de promoción, de mejora de la comercialización o de apertura de nuevos mercados que pueda ser beneficiosa para el colectivo debe estar armonizada», apostilló.
En la asamblea se incidió en que la DO queda muy restringida a la comarca de la Ribera y, a preguntas de algunos exportadores, Rodríguez Mulero señaló que cualquiera que esté interesado puede promover otra marca de calidad -indicó que la Adminitración tiene que atender cualquier iniciativa que responda a la legalidad-, pero también advirtió de que en Europa hay demasiadas figuras de calidad y que una marca bien trabajada puede ser tan importante para el sector como una de estas figuras. «Al final es un trabajo de promoción de una marca y se trata de hacer lo que el sector necesite», expuso el secretario autonómico.
Cabe recordar que el presidente de la DO «Kaki Ribera del Xúquer», Cirilo Arnandis, reclamaba en una reciente entrevista en estas páginas una mayor implicación del comercio privado en la promoción del caqui ya que, según señaló, hasta ahora toda ha corrido a cargo de la DO. «Es más cómodo no estar y no pagar que estar, pero yo pienso que por compromiso deberían estar todos porque este producto es hoy lo que es porque la DO y las cooperativas y comercios que están en ella han hecho lo que tenían que hacer», incidió Arnandis, que también advirtió de que «si no somos capaces de concentrar la oferta estamos totalmente vendidos».
Vicente Masiá, por su parte, reivindicó en Alginet la necesidad de abonar buenos precios a los productores: «Nosotros queremos que las cooperativas paguen bien caro el producto, cuanto más caro lo paguen al productor, el comercio privado más caro lo tendrá que pagar. Eso quiere decir que tendrá que ir al mercado a vender más caro no más barato».
Por otra parte, Rodríguez Mulero admitió que existe preocupación por la aparición de semillas en algunos frutos cuando en el caqui no tendrían por qué haber, defendió que hasta el momento se han detectado casos esporádicos y señaló que se está intentando que no vaya a más. En este sentido, reivindicó que el control de la distribución varietal sea más exahustivo para evitar la introducción de variedades que propician esta polinización. El secretario autonómico de Agricultura se mostró contundente al señalar que no se puede caer en los mismos errores que se incurrió en los cítricos.
Como ya informó Levante-EMV, en la asamblea se detalló que, en base a la producción asegurada, se estima que el próximo año habrá una producción récord que puede alcanzar las 300.000 toneladas, lo que supone un incremento de entre el 25 y el 30 % respecto de la producción de la pasada campaña. Tanto el presidente de la asociación de exportadores como el secretario autonómico confirmaron que la perspectiva de que en pocos años se puedan duplicar ampliamente esas cosechas debido a la proliferación de nuevas plantaciones en los últimos años.
