El Ayuntamiento de Corbera ha organizado para hoy sábado una jornada de puertas abiertas en la cantera. Es la primera vez que la administración local celebra un acto de este tipo y, según explicó el alcalde, Jordi Vicedo, la intención es explicar los trabajos que se están haciendo y el proceso de restauración de la montaña.
El gobierno local quiere ofrecer total «transparencia», dijo el primer edil y que la gente pueda preguntar todas sus dudas. Los vecinos interesados deben haberse inscrito previamente en las oficinas municipales para organizar el transporte hasta este lugar. A las 10.30 horas comenzará la visita en la que el alcalde explicará todo lo relacionado con la cantera durante sus cinco años de gobierno y los técnicos de la empresa adjudicataria detallarán el sistema de trabajo que van a seguir para cumplir con la licencia que les otorgó el consistorio. Así, los vecinos podrán ver de primera mano la zona que ya se ha restaurado.
El ayuntamiento ha establecido con la empresa Canteras y Áridos Llaurí SL, encargada de la explotación de la cantera de Corbera, un sistema de licencias parciales para ir trabajando en este paraje por tramos. Con lo que la empresa debe ir restaurando cada zona que explota. De hecho, el alcalde visita mensualmente la cantera para comprobar que, a la vez que se realizan los trabajos de explotación, también se restaura el paraje.
Superficie explotada
Actualmente esta empresa puede trabajar en el 80% de la cantera y en octubre de 2017 finalizará la actual licencia. Entonces, el gobierno local y la empresa se sentarán para analizar la situación de la cantera y decidir si se concede una nueva licencia para explotar el 20% restante. Lo que dice tener claro el alcalde es que no quiere que a partir de 2017 se tarde otros dos años en explotar la cantera, el consistorio pretende que el periodo sea más corto.
Defienden «la máxima restauración en el menor tiempo posible», señaló Vicedo, que calcula que, del total de la superficie de la cantera, ya se ha restaurado el 50%. Este paraje ambiental tiene una extensión de 17 hectáreas, el equivalente a la mitad del casco urbano de Corbera.
Durante los trabajos de explotación se extraen piedras de tipo caliza y escollera, que se utilizan para la construcción de la carretera A38 entre Sueca y Favara. Posteriormente, la zona de la que se han extraído estas piedras se reforesta con pinos y matorrales autóctonos, como el tomillo y el romero.
No obstante, desde la empresa concesionaria ya indicaron anteriormente que este último año se ha caracterizado por las escasas lluvias y la sequía está dificultando el adecuado crecimiento de los pinos. Aún así, los pinos que ya son adultos y tienen alrededor de 10 años sueltan la denominada pinaza, conjunto de hojas del pino, que provoca el nacimiento de nuevos pinos de forma natural, añadieron.
Asimismo, cada dos años se realiza un vuelo aéreo para comprobar la evolución de la zona y las consellerias de Industria y Medio Ambiente también se encargan de controlar la actividad.
