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El vial que descongestionará el tramo Cullera-Favara se construye a medio gas

El Gobierno asegura que sigue con las obras de la A-38 pese a que algunos trabajos se han paralizado al incorporar modificaciones Ahora sólo se realizan movimientos de tierra y terraplenes

El vial que descongestionará el tramo Cullera-Favara se construye a medio gas

El Ministerio de Fomento prosigue con las obras de la A-38 entre Cullera y Favara, aunque algunas partes de estos trabajos se han paralizado temporalmente debido a que se están haciendo algunas modificaciones en el proyecto.

Desde la delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana explicaron ayer a Levante-EMV que «la obra no está parada», pero «se está haciendo un modificado de algunas unidades de obra» y, por tanto y de forma temporal, «se dejan de ejecutar esas unidades». Pero ello no impide que el resto de los trabajos sigan su curso ni que se paralice el proyecto, ya que se trabaja por unidad de ejecución.

Así, actualmente se están llevando a cabo movimientos de tierras y subiendo terraplenes. La A-38 se sitúa junto a los campos de arroz de la comarca de la Ribera Baixa y ello provoca que sea un terreno con mucha permeabilidad.

Obra esperada

A finales del año pasado el Gobierno inauguró el tan demandado acceso norte a Cullera. Ahora queda construir la entrada sur a Cullera y la de Favara. Durante el año en curso está previsto que se inviertan un total de 16 millones de euros y, de momento, en lo que llevamos de año ya se han gastado dos millones en esta obra. En total, toda esta infraestructura cuenta con un presupuesto de 118 millones.

El acceso norte a Cullera se había convertido en un verdadero punto negro, en el que ya se habían producido diversos accidentes con víctimas mortales. Una vez eliminado este peligroso tramo, ahora queda realizar el acceso sur a la principal ciudad turística de la comarca, una obra que ayudaría a descongestionar el tráfico en este municipio.

Desvío de Favara

También es clave construir el desvío de Favara, ya que en esta pequeña localidad se cruzan la N-332, la AP-7 y la CV-510; lo que representa una enorme concentración de vehículos y provoca largos atascos, especialmente durante la temporada turística debido a que muchos conductores utilizan estas vías para dirigirse a la costa. Por ejemplo, la CV-510 que une el interior de la Ribera con las playas de la comarca.

Al igual que en el acceso norte de Cullera, en Favara también se han producido diversos accidentes con víctimas mortales durante estos años. Los ayuntamientos de ambas ciudades llevan tiempo reclamando que se ejecuten cuanto antes estos trabajos. No obstante, todas estas actuaciones no se finalizarán hasta el año 2018 o 2019, según indicó el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, en una visita que realizó el pasado mes de septiembre a estas obras.

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