La Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), dependiente del Ministerio de Agricultura, acometerá en los próximos meses obras de modernización y consolidación de los regadíos de las comunidades valencianas de regantes de Carcaixent, Llíria y Carlet, por un importe total de 14,8 millones de euros. Las actuaciones afectan 2.572 hectáreas y 4.149 agricultores con plantaciones de caquis, naranjas, melocotoneros y hortalizas.

Los convenios fueron firmados ayer en la sede de la Delegación de Gobierno por los presidentes de las comunidades de regantes de la Real Acequia de Carcaixent, Pedro Juan Borrás y de la Acequia Común de Carlet, José Suey. Con un cupo de hasta 14,8 millones de euros si se realizan en su totalidad, las obras se acometerán durante este año en los regadíos de Carcaixent, cuyo convenio ya está licitado, mientras que en Llíria y Carlet tendrán un plazo más amplio.

La iniciativa persigue un uso más eficiente del agua con un ahorro estimado del 25 %. Además, se modificarán las instalaciones con la introducción de nuevas herramientas y se mejorarán las ya equipadas, junto a una disminución en la utilización de fertilizantes. El presidente de Seiasa ha destacado que la intervención conllevará «un aumento del empleo y las exportaciones en unas infraestructuras cada vez más competitivas».

Las obras en Carcaixent, valoradas en 8,53 millones de euros en 536 hectáreas para 780 regantes, se centran en una red de riego localizado de alta frecuencia, así como en optimizar los recursos superficiales para que su adaptación a las condiciones del Plan Hidrológico del Júcar.

En Carlet, con un presupuesto de 1,47 millones en una actuación que abarca 96 hectáreas y beneficiará a 57 comuneros, se sustituirá el riego tradicional por un sistema de localizado que permitirá optimizar los recursos hídricos de la zona de la Daya y del Camino de Alzira.

La directora general de Política Rural subrayó que estos convenios también suponen un «desafío» para los agricultores valencianos, lo que ha relacionado con la necesidad de «disponer de más capital humano con mayor formación para aprovechar esta tecnología y sacar todo su potencial».

Por su parte, el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues estimó «básica la mejora de los regadíos y los trasvases» en una Comunitat con «circunstancias particulares» como la sequía por la falta de lluvias y al tratarse de un sector considerado estratégico para la economía autonómica.