La Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas ha denegado el régimen de visitas a la familia del pequeño Rafa al considerar que «no existe pronóstico de reunificación familiar». El jueves se cumplió un mes de la última protesta convocada por allegados de esta familia alcireña que acogió durante un año al hijo de una sobrina, y la única noticia recibida en este período ha sido la confirmación de que la Administración desestima el régimen de visitas solicitado tanto por la madre como por los tíos que lo acogieron, según ha confirmado Pura García, que mostró su voluntad de seguir luchando en la vía judicial para que su sobrino regrese a Alzira.
La familia está estudiando la formalización de una demanda contra la decisión de la conselleria de poner fin al acogimiento. De hecho, ya inició el procedimiento de oposición anunciando su intención de formalizar la demanda para poder conocer el expediente administrativo que ha derivado en esta resolución y se encuentra en proceso de armar su argumentación para tratar de rebatir los informes técnicos. Paralelamente, Pura García comentó que gracias a las gestiones realizadas por el alcalde de Alzira, Diego Gómez, está pendiente de mantener una reunión con la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, para plantearle lo que considera una injusticia.
Hijo de una sobrina
«Son ya tres meses sin saber nada de Rafa, especialmente por la noche lo llevo mal. Nos acordamos mucho de él», comentaba Pura García a Levante-EMV, mientras anunciaba que tiene previsto entregar en mano a la consellera las más de 3.000 firmas recogidas para pedir a la Administración el regreso del pequeño Rafa con su familia.
La familia Madrid García se vio obligada a entregar el pasado 29 de febrero a técnicos del departamento del Menor al niño que habían acogido en su casa durante un año. Se trata del hijo de una sobrina que presenta una discapacidad leve y que, al parecer, llegó a renunciar a la custodia del niño tras abandonar temporalmente la casa de sus tíos, en la que vivía con el menor, aunque con posterioridad ha participado en las diferentes manifestaciones celebradas en Alzira y manifestado su voluntad de que el niño regrese con sus familiares.
La resolución de la Conselleria de Políticas Inclusivas que deniega el régimen de visitas solicitado argumentado que no existe pronóstico de reunificación familia representa un jarro de agua fría ya que aboca a la familia a la vía judicial para conseguir su propósito.
Familiares y amigos ha convocado diferentes manifestaciones de apoyo y para reclamar el regreso a Alzira del pequeño Rafa. La última, el pasado 2 de mayo, coincidiendo con el segundo aniversario del niño. Los participantes se concentraron en la plaza Mayor para cantar el «cumpleaños feliz» y realizar una suelta de globos tras la lectura de un manifiesto que reclamaba «justicia y que no se olvide que el niño tiene familia». La madre también estaba presente.
