El mercado inmobiliario vuelve a niveles de antes de la crisis, pero los precios son un 60% inferiores a los de 2007 y la mayor parte de las transacciones corresponden a apartamentos que adquieren turistas de la Ribera.
El mercado inmobiliario de Cullera ha consolidado su recuperación. Durante el primer trimestre de este año hubo un total de 88 transacciones inmobiliarias, la mayor cifra para este periodo del año desde el inicio de la crisis, según se desprende de un estudio realizado por Vive Soluciones Inmobiliarias a partir de los datos publicados por el Ministerio de Fomento. Los datos provisionales del ministerio muestran que entre enero y marzo de 2016 hubo 88 transacciones y, para encontrar una cifra superior durante el mismo periodo del año, hay que remontarse a 2007, cuando se registraron 131. Además, ya se conocen los datos consolidados de compraventas de 2015 y, en total, hubo 445 operaciones, la mayor cifra desde el inicio de la crisis económica. En este caso también hay que ir a 2007 para encontrar un número superior de transacciones.
Durante los años de crisis las compraventas de pisos en Cullera oscilaron entre las 278 y las 374, es decir, hasta ahora nunca se había vuelto a superar la barrera de las 400 operaciones inmobiliarias.
El gerente de Vive Soluciones Inmobiliarias en Cullera, Antonio Giraldos, valora positivamente estos datos y asegura que «desde mediados de 2015 empezó a registrarse una recuperación del mercado inmobiliario» y actualmente «estamos en valores de antes de la crisis, ahora el número de compraventas es similar a las registradas en 2007». Como causas de esta recuperación, las inmobiliarias apuntan a que la gente ha perdido el miedo a comprar, hay más facilidad de crédito, la rentabilidad de los depósitos bancarios es casi nula y el precio es mucho más atractivo por la corrección de la burbuja inmobiliaria.
Precios bajos
En cuanto a los precios, hay que matizar que estos siguen siendo entre un 50% y un 60% inferiores a los de 2007. Así, si hace nueve años un apartamento en primera línea de playa con dos habitaciones y piscina costaba alrededor de 300.000 euros, ahora su precio ronda los 150.000 euros. En cuanto a las ventas de pisos también hay que señalar que la mayoría corresponden a viviendas turísticas. Por ejemplo, en Vive Soluciones Inmobiliarias vendieron trece apartamentos durante el pasado mes de mayo y todas ellos estaban en la zona de la playa. El perfil del comprador responde a un turista de mediana edad (cuarenta años o más) procedente del interior de la comarca de la Ribera (Alzira, Algemesí y Carcaixent, sobre todo). En segundo lugar están los turistas procedentes del centro peninsular (Madrid y alrededores) y cabe destacar que se ha registrado una recuperación del mercado francés, los turistas galos vuelven a querer tener un apartamento en la playa de Cullera.
