Favara trata de encontrar una solución, aunque sea provisional, a los graves problemas de tránsito que genera cada verano la carretera comarcal que llega desde Alzira. En primer lugar, se prohibirá el tráfico de vehículos pesados por el casco urbano del pueblo (incluyendo la CV-510, San Vicente y Reyes Católicos). Tambien se señalizará el itinerario alternativo a las playas, desde la rotonda de Corbera por la CV-509 al A-38 (por la autovía en Cullera).
Otras medidas a tomar serán la mejora del paso de peatones San Vicente/Reyes Católicos, y la instalación de uno nuevo en la misma calle, frente a correos. Con esta solución, se pretende mejorar la fluidez del tránsito y sobre todo la seguridad vial. No obstante, la solución definitiva pasa para sacar la CV-510 del casco urbano, por lo que el equipo de gobierno ya está trabajando en la recuperación de los proyectos y propiciando reuniones con las cabezas de áreas responsables del Ministerio de Fomento.
El primer teniente de alcalde, Rafael Gisbert, y la concejala de Urbanismo, Isabel Borrás, se reunieron recientemente con Pablo Seguí, diputado del área de carreteras e infraestructuras de la Diputación de Valencia, responsable de la carretera CV-510. El pasado mes de noviembre de 2015 los concejales de Favara ya le trasladaron al diputado la necesidad de dar una solución rápida y efectiva a las deficiencias de la vía, pero la respuesta de Pablo Seguí fue que el desvío de la carretera era una gestión lenta y a largo plazo porque el Ministerio de Fomento tenía que dar su beneplácito al enlace, y las elecciones generales se encontraban a la vuelta de la esquina.
Con todo, los últimos atropellos producidos dentro del pueblo junto a las interminables horas de tránsito que viene sufriendo el vecindario han provocado que se pidiera una cita con carácter urgente, por parte de alcaldía, al diputado con el objetivo de tratar la problemática de Favara como consecuencia de la intersección de la CV-510 con la N-332, sobre todo en verano y fines de semana, época de grandes atascos.
Tras la exposición por parte del primer teniente de alcalde y la concejala de los problemas que están sufriendo los vecinos, el diputado de Carreteras se comprometió a estudiar una solución rápida y eficaz para este verano. La pasada semana, los técnicos del Área de Conservación de Carreteras estuvieron en Favara. En colaboración con los responsables municipales, se acordaron las actuaciones anunciadas.
El consistorio confía que las dos administraciones implicadas en el tema, el ministerio y la diputación, se tomen el tema más seriamente de como lo han tratado hasta ahora, puesto que la corporación piensa que los vecinos de Favara «no son población de tercera y están sufriendo una problemática que ya se puede de calificar de grave» para estar en la lista de los puntos negros en incidentes de tránsito. Lo que más indigna es que unos de los principales motivos de la no-ejecución de los enganches de las carreteras sea simplemente por cuestión económica con «tanto dinero como se han malgastado en infraestructuras innecesarias y que ahora están inutilizadas».
