La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) ha denunciado ante el Comité de Seguridad y Salud Laboral de la provincia de Valencia que los expedientes del juzgado número 5 de Sueca, tanto vivos como los archivados, «se encuentran por el suelo, alrededor de los empleados públicos que allí trabajan o apilados en cajas en mitad de los pasillos u otras zonas de paso».
Este hecho ya fue denunciado por el sindicato en julio de 2014 sin que desde la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas «hayan dispuesto las estanterías necesarias, con lo que la situación se ha ido agravando», aseguraron ayer a través de un comunicado.
Es por ello, que una vez más, han solicitado a la Dirección General de Justicia que dote del mobiliario de oficina necesario a la mayor brevedad «de manera que los empleados puedan trabajar en las condiciones adecuadas sin poner en riesgo su seguridad».
Consideran que esta situación representa «un problema de seguridad para los funcionarios, ya que los expedientes se han llegado a desmoronar en más de un ocasión». «No solo obstaculizan lugares de paso, sino que dificultan las labores diarias del personal, ya que resulta completamente imposible desarchivar o archivar los expedientes», añadieron en su escrito de denuncia que presentaron acompañado de fotografías.
Archivo en los baños de Alzira
La situación de Sueca no es un caso aislado. La misma central sindical denunció a principios de este año que en el juzgado de lo Penal número 15 de Alzira, que sufren el mismo problema hasta el extremo que había expedientes apilados en los baños.
En su escrito de denuncia, que fue presentado ante la Inspección de Trabajo, detallaban que las dependencias judiciales están ubicadas «en un bajo sin ventilación ni espacio para trabajar, faltan estanterías y los expedientes se acumulan en el suelo». Además advertían del riesgo añadido que significa para los trabajadores carecer de un arco de seguridad y de ventanilla en el mostrador. Esta circunstancia condiciona que el riesgo para los empleados sea elevado dada la importancia y gravedad de los juicios que allí se celebran, según apuntaban. A esta situación se suma que "el único acceso de entrada y salida para reos, testigos, profesionales y funcionarios es la puerta principal" y que en numerosas ocasiones «agentes de policía han tenido que escoltar a los propios trabajadores a sus coches», afirma el sindicato.
