Cullera se declaró, hace un año, «Ciudad libre de desahucios» y el objetivo se ha logrado. La intervención directa del ayuntamiento ha frenado cuatro desahucios el último año. El consistorio se ha implicado en la batalla por evitar que vecinos del municipio perdieran su casa o cargaran con la deuda de por vida por no poder hacer frente al pago de la hipoteca.

El alcalde Jordi Mayor indicó que eran todos los casos de los que ha tenido constancia directa el consistorio, por lo que se congratuló de que un año después de haber negociado directamente con los directores de las entidades financieras se haya cumplido el compromiso adquirido en aquel momento por parte de éstas de no dejar en la calle a nadie. «Les advertimos en su momento que si lo hacían, sacaríamos nuestro dinero y dejaríamos de trabajar con ellos y por ahora han cumplido su palabra», destacó el primer edil del ayuntamiento de Cullera.