Desde el pasado lunes la localidad de Turís ha restringido el horario de agua potable con cortes del suministro por las noches debido a que la grave situación de sequía ha dejado los acuíferos que abastecen el casco urbano bajo mínimos. El corte del suministro entre las diez de la noche y las ocho de la mañana representa una primera medida de ahorro aunque las autoridades municipales alertan de que la situación se podría agravar en los próximos días si los dos pozos de los que se abastece la población siguen bajando de nivel.
Cabe recordar que el pasado verano ya se dio esta misma situación. La falta de lluvia provocó que los dos pozos que suministran el agua potable a Turís no aflorasen la suficiente cantidad para abastecer a la población. La ausencia de precipitaciones se ha agudizado si cabe en el último año, lo que tiene una repercusión directa en el bajo nivel que presentan los acuíferos.
El entonces alcalde de Turís, Ismael Corell, con el objetivo de paliar esta situación, llegó a un acuerdo con un pozo privado de Godelleta ubicado a unos 800 metros del que abastece a Turís para comprar agua y evitar entre ambos que el municipio quedara desabastecido durante el verano. Cabe recordar que el censo de Turís se sitúa en torno a los 6.500 habitantes.
Este año la situación ha empeorado ya que desde el pozo de Godelleta no está llegando la cantidad de agua contratada -en su momento se habló de un millón de metros cúbicos del que se podría disponer por fases- debido a que este pozo también ha sufrido un notable descenso de su caudal por la sequía.
El consistorio turisano espera poder superar esta situación y fuentes municipales señalaron ayer que está previsto que durante este invierno se liciten las obras y se ponga en marcha la canalización del nuevo pozo del Ràfol. Se trata de una zona en la que en su día se realizaron prospecciones para determinar si existían caudales suficientes para suministrar al casco urbano y se obtuvieron resultados muy esperanzadores.
Se trata no obstante de un proyecto de gran envergadura que requiere de una inversión de varios millones de euros y que debido a la sequía se ha convertido en urgente. Fuentes del Ayuntamiento de Turís señalaron que le objetivo es que esta obra esté finalizada para el próximo verano de forma que no se repitan las restricciones que se han visto obligados aplicar desde el 1 de agosto, aunque en algunas zonas del núcleo urbano apenas se habían dejado sentir.
