L'Assut de Cullera presenta un notable estado de abandono. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) hace años que no limpia el cauce del río cerca de la construcción hidráulica situada en el término municipal de Fortaleny, por lo que la acumulación de «arundo donax», la conocida popularmente como caña, es tan abundante que justo delante de la presa se ha creado una barrera natural de orilla a orilla del río de esta especie invasora que dificulta el paso del agua y, sobre todo, obstaculariza el curso de los rastrojos de vegetación que discurren río abajo. Esto supone un verdadero problema en épocas lluviosas como en otoño, cuando el fuerte incremento del caudal arrastra todos los rastrojos hacia Cullera, donde se pueden originar verdaderos atascos.
Algunos de los puntos que más se podrían ver afectados son el puente de la vía del tren y el puente de piedra, en Cullera, cuyos pilares se encuentran sumergidos dentro de las aguas del Xúquer. «Si el azud se congestiona de ramas y cañas, cuando baje un buen caudal se lo llevará todo hacia Cullera, donde se podría originar un buen taponamiento», explica el vecino de Fortaleny y miembro de Xúquer Viu, Frederic Piqueres.
Ésta es una de las principales consecuencias que se teme, pues «aunque estén las cañas en el medio del cauce no peligra que se origine un tapón en el propio azud. La propia fuerza del agua acabará llevándose por delante las cañas cuando baje un buen caudal», augura. Pese a ello, Piqueres lamenta el estado de abandono del cauce y encuentra en la notable vegetación que, sobre todo, puebla las orillas un problema que se debería solucionar. «La Confederación hace 6 o 7 años que no realiza ningún trabajo de limpieza. Antes mantenían el cauce limpio, actuaban 2 o 3 veces al año, pero ahora es lamentable la situación en la que se encuentra el río», explica. En este aspecto, el propio Piqueres recuerda que hace años «la CHJ contrataba a trabajadores del pueblo para mantener limpio el río a través de convenios con Diputación o el propio ayuntamiento, sin embargo esto ya no ocurre».
Un paraíso para los mosquitos
Además de la barrera natural que se ha formado justo delante de la construcción, concretamente sobre unas pequeñas islas que se forman, destaca en esa parte del río la gran población de cañas que se asientan sobre la superficie conocida por los vecinos como «el arenal». Se trata de una amplia extensión de terreno arenoso que franquea las aguas del Xúquer y que no hace muchos años se distinguía por su limpieza, aparentando ser una playa fluvial. Ahora, el «arundo donax» puebla gran parte de esta zona, que se ha convertido en un emplazamiento ideal para la proliferación de insectos como la mosca negra.
El portavoz de Xúquer Viu, Paco Sanz, señala también que «la CHJ ha descuidado el río hasta tal punto que las especies invasoras se han adueñado del cauce». Sanz indica que «hace falta invertir en la limpieza del río y, además, en repoblar el lecho con bosque de Ribera». De hecho, hace unos años este colectivo ecologista ya denunció la paralización de los trabajos de condicionamiento del río y de recuperación del lecho fluvial por parte de la Confederación.
