Los 45.096 alumnos matriculados en los colegios e institutos de la Ribera regresan hoy a las aulas -salvo los de Algemesí, que lo hicieron ayer ya que hoy es fiesta en la localidad- para iniciar un nuevo curso escolar que presenta como principales novedades el estreno del nuevo colegio del Perelló tras doce años con todos los alumnos en aulas prefabricadas -seis promociones completas no han llegado a dar clase en un colegio de obra- y de las nuevas instalaciones de la Academia Xúquer de Alzira, un centro concertado que se traslada a un nuevo edificio en Tulell tras una inversión de más de cuatro millones de euros, y la ampliación de las aulas de Infantil para niños de dos años ya que la experiencia piloto que el curso pasado únicamente incluyó al CEIP Francesc Pons de Carcaixent ha incorporado también a los colegios Lluís Vives y Tirant lo Blanc de Alzira, Cervantes de Algemesí, Blasco Ibáñez de Massalavés, Santa María d'Aigües Vives de la Barraca y el CRA Ribera Baixa de Fortaleny. Algunos de ellos, como el de Massalavés, no habían recibido ayer el mobiliario para esta aula.
Será también el noveno curso consecutivo que los cerca de 700 alumnos del colegio Evarist Calatayud de Montserrat empiezan en barracones aunque, esta vez sí, con la perspectiva de que sea el último ya que el calendario de obras del nuevo centro prevé su finalización en el último trimestre del año con la previsión de que se pueda realizar el traslado aprovechando las vacaciones de Navidad. También la comunidad educativa del Severí Torres de Villanueva de Castellón inicia el curso visualizando que la solución a su reivindicación histórica está más cerca ya que las obras de remodelación del centro han comenzado, aunque el plazo de ejecución estimado es de quince meses.
Cabe señalar que, tras los problemas para ocupar las nuevas instalaciones que provocaron las protestas de la comunidad educativa del Perelló a finales del pasado curso, el 25 de julio se firmó el acta de ocupación que ha permitido el traslado y, con él, la retirada de los barracones para poder construir el gimnasio y el nuevo patio. El último barracón se retiró el viernes 2 de septiembre a las 14,30 horas. El centro se encuentra abierto a los vecinos desde el día 1 para que todo el pueblo que ha luchado por él lo conozca e incluso se invitó a los alumnos que el curso pasado acabaron sexto de Primaria a una merienda para que conocieran el colegio que, pese a las perspectivas iniciales, ellos no pudieron estrenar.
El representante del STEPV en la Ribera, Pere Calpe, valoró ayer que el curso comienza en la comarca con normalidad -dijo no haber recibido quejas por falta de profesorado en los centros, aunque admitió que no quiere decir que no se hayan producido casos- y lamentó que la Conselleria de Educación no hubiera querido demorar el inicio del curso un par de días ya que éste arrancará con altas temperaturas y con muchos pueblos con las fiestas en la calle.
Desde la Federació de l'Ensenyament de Comisiones Obreras, por su parte, Paco Rodríguez, valoró que empieza a verse «la recuperación de los recortes» y señaló como ejemplo de ello el caso del instituto Joan Fuster de Sueca, que cuenta este curso con cuatro grupos más, uno para primero de la ESO, otro en primero de Bachillerato, otro para segundo y uno más para la Formación Profesional Básica. «El efecto directo en las aulas es una bajada de la ratio y un aumento de las plantillas docentes», incidió el representante de CC OO que, no obstante, no dudó en exigir la reversión de los recortes e impulsar un cambio educativo.
«La Federación de l'Ensenyament de CC OO considera que la construcción de nuevos centros educativos o la eliminación del fibrocemento no ha de ser novedad, sino el inicio de la recuperación de la educación pública», indicó Rodríguez, que valoró las mejoras en el inicio del curso como un «comienzo positivo pero insuficiente» y en esta línea reclamó la necesidad de recuperar los recortes en materia salarial que ha sufrido el profesorado.
