La situación de abandono de muchos campos del término municipal de Cullera pone en riesgo a los vecinos y tierras colindantes por el riesgo de incendio y la propagación de plagas de insectos y roedores, acumulación de basura, etcétera. El ayuntamiento de la ciudad ha decidido combatir este peligro y,por primera vez, ha limpiado de oficio un terreno baldíoa.

El consistorio obliga los propietarios a acondicionar sus terrenos y contempla sanciones de hasta 3.000 euros en caso de que no se atienda el requerimiento. Cuando el ayuntamiento de oficio, posteriormente pasará la factura del coste de la limpieza al propietario a razón de 100 euros por hanegada. A tal efecto, se ha adquirido una retroexcavadora, puesto que la anterior estaba averiada desde hace años.

Durante los últimos meses, el consistorio ha enviado más de 300 notificaciones a los propietarios de tierras sin cultivar para que las dejen en un estado óptimo. Alrededor del 35 % han respondido positivamente y han limpiado las parcelas. En esa labor de investigación se han implicado varios departamentos municipales. La misma Policía Local o el Servicio de Caminos Rurales han realizado informes en colaboración con otros organismos, como el Registro de la Propiedad.

No siempre se puede encontrar al dueño de la tierra, puesto que muchas pertenecen a bancos o empresas en quiebra que adquirieron terrenos durante los años de especulación urbanística, en especial en las zonas donde se implantaron los PAI's del Marenyet y del Brosquil. Otras están incluso inscritas a nombre de propietarios que fallecieron hace 100 años.

«Estamos realizando un esfuerzo importante para recuperar nuestro término y evitar problemas mayores causados por las viejas políticas de urbanismo depredador de la época del PP», ha destacado el alcalde, Jordi Mayor, quien subraya que el abandono de tierras ha causado numerosos incendios en Cullera en uno de los cuales incluso una familia perdió su casa.

El concejal de Agricultura, Marc Joan recuerda que «mantener el término en condiciones es cosa de todos» y pide «paciencia» a los propietarios de las tierras adyacentes afectadas. «Poco a poco, actuaremos en todo el término», subraya.

El edil destaca que el ayuntamiento «no sólo quiere que el término esté limpio, sino que busca poner en valor esas tierras para hacer de la agricultura un sector económico viable». En ese sentido, se está preparando un plan de dinamización agraria que se presentará en breve. En una semana aproximadamente se dará a conocer. Todavía quedan muchas tierras en un estado lamentable y de hecho el ayuntamiento ya tiene programadas actuaciones que tendrán continuidad en el tiempo.