El operativo policial de la Guardia Civil contra dos hombres y una mujer de Carcaixent ha podido averiguar que no eran ellos los que suministraban la droga a los compradores sino que contaban con otras personas adicionales que se encargaban de la distribución. Como ya avanzó Levante-EMV el pasado jueves, la detención se produjo por presuntamente almacenar en una vivienda de Carcaixent un total de 39 kilos de marihuana, 380 gramos de cocaína y una pequeña cantidad de hachís, así como varias armas de fuego sin licencia, entre ellas un rifle de asalto A-47. Tras las pesquisas, los agentes han esclarecido que los detenidos eran los encargados de suministrar la droga a terceras personas para que fueran ellas las encargadas de la venta al menudeo. Por todo ello, los tres sospechosos —de 42 años y nacionalidad española— fueron arrestados por su implicación en los delitos de trafico de drogas, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico.
La operación se inició el pasado mes de mayo, cuando los agentes empezaron a investigar la posibilidad de que los residentes de un domicilio de Carcaixent traficaran con drogas, por lo que iniciaron la operación «Mimao», que se saldó con los responsables arrestados a finales de septiembre. Las diligencias han pasado a disposición judicial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Alzira. El operativo fue coordinado por la Guardia Civil de Carcaixent y se suma a los realizados por la Benemérita para erradicar el tráfico, cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes en Valencia.
