El Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna, el Ayuntamiento de l'Alcúdia y la empresa Reciclados Ribera del Xúquer como concesionaria han alcanzado un acuerdo para cumplir la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que anula la modificación del contrato aprobada en febrero de 2012 por el anterior gobierno del ente gestor de la basura (PP) -que entre otros aspectos incorporaba la construcción del vertedero de rechazos en Guadassuar- y que, a falta de su ratificación por la asamblea, cierra la «guerra de los residuos» en la comarca, en palabras del representante de l'Alcúdia en el consorcio, Paco Sanz, o instaura la «paz social», según la lectura del actual presidente, Salvador Montañana.
Una consecuencia directa del acuerdo es que la nueva planta de selección de residuos y recepción de voluminosos, que se encuentra en fase de pruebas desde el mes de agosto, podrá entrar a pleno rendimiento de forma inminente, mientras que la construcción del vertedero que recibirá los rechazos derivados de este proceso de triaje queda a expensas de que, descartada la opción de Guadassuar, se consensúe otro emplazamiento. Cabe recordar que el consorcio ha encargado a la Agència Energètica de la Ribera un estudio sobre posibles localizaciones en base a las características del terreno que espera recibir antes de concluir el año.
La sentencia del TSJ, al anular la modificación del contrato aprobada en 2012, deja en vigor el firmado en 2007 cuando la realidad es otra y, por ejemplo, la planta de selección está ya construida. El acuerdo alcanzado no pone ninguna objeción a esta nueva infraestrucura. «Se queda conforme había quedado», resumió Montañana.
Por otra parte, y frente a la previsión de construir 49 ecoparques recogida en el contrato de 2007 -que se redujo a 22 con la modificación anulada por el TSJ-, el acuerdo alcanzado el jueves contempla mantener la red actual de los 22 ya existentes a los que se sumarán uno junto a la misma planta de tratamiento de residuos de Guadassuar, otro en l'Alcúdia, también Corbera y Turís estrenarán nuevos ecoparques mientras que el de Alzira se ampliará. El acuerdo en este campo contempla habilitar un segundo ecoparque móvil sobre camión -el contrato de 2007 no contemplaba ninguno y en estos momentos hay uno en funcionamiento- y que todas las instalaciones de este tipo cuenten a partir de ahora con un punto de recogida de envases fitosanitarios. El vicepresidente del consorcio Fernando Pascual destacó que el canon de explotación de los ecoparques será el aprobado en 2012.
La futura construcción del vertedero constituye la última pata de este acuerdo, que asumirá la empresa concesionaria cuando el consorcio, de acuerdo con la Generalitat, decida el emplazamiento y obtenga las autorizaciones pertinentes.
La elección por el anterior consorio de una ubicación en el término de Guadassuar, junto a la Acequia Real del Júcar, provocó la oposición frontal del Ayuntamiento de l'Alcúdia y otros colindantes, si bien el primero recurrió esta decición ante los tribunales que le acabaron dando la razón. La ejecución de la sentencia dictada en febrero por el TSJ se plasma a través de este acuerdo.
