Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Carcaixent descarta que el enlace con la A-7 esté operativo antes de 2019

En breve se licitará el proyecto básico que definirá la conexión con la CV-50 a la altura de la rotonda del Molí Borrego, pero el consistorio de Salom admite que el proceso se alargará hasta la siguiente legislatura

Carcaixent descarta que el enlace con la A-7 esté operativo antes de 2019

El Ayuntamiento de Carcaixent da por hecho que la variante que le ofrecerá una mejor salida hacia la autovía no estará disponible en la actual legislatura y que el proyecto que ya está tomando forma en la conselleria podrá ser una realidad para los vecinos y vecinas sólo a partir de 2019. De ahí, en adelante. Así lo explicó el alcalde de la localidad, Paco Salom, en exclusiva a este periódico. A pesar de que la carretera es una de las necesidades más perentorias de Carcaixent, el primer edil no considera que sea posible contar con ella antes de dicha fecha, ya que actualmente se está elaborando el informe previo que marcará la mejor opción para acoger el vial. Seguramente, según ha podido saber Levante-EMV, el enlace tomará forma en el término municipal de Alzira, conectando con la Avinguda de la Ribera. Como ya se anunció, la solución definitiva no pasará por Benimuslem. La opción de construir un nuevo vial de cinco kilómetros que desde la rotonda de Cogullada fuera a buscar en línea recta la A-7 está descartada por la complejidad técnica y administrativa de atravesar una zona inundable, según reconoció en su momento el alcalde de Carcaixent, Paco Salom, que indicó que la conselleria va a estudiar fórmulas para unir la rotonda Norte de Carcaixent con la CV-50 a la altura de la rotonda del Molí Borrego, donde arranca la autovía hacia Guadassuar.

Mejorar las conexiones con la autovía A-7 es una antigua reivindicación de Carcaixent, la ciudad peor comunicado de la Ribera, según admitió la propia Conselleria de Infraestructuras cuando, hace poco más de un año, el nuevo gobierno planteó esta reivindicación y puso sobre la mesa la posibilidad de construir una carretera que ofreciera una salida por Benimuslem. El gobierno de Carcaixent considera que actualmente hay «un embudo en Alzira» que se puede convertir en «tapón» a poco que repunte el tráfico rodado si no se ofrece una salida alternativa a los vehículos procedentes de Carcaixent. El director general dejó entrever en su respuesta que la licitación del proyecto básico que definirá esa conexión era inminente.

La conselleria se comprometió a que hacia el mes de octubre saldría la licitación del proyecto básico. Sin embargo, dicho plazo ya ha quedado atrás. El enlace de Carcaixent con la autovía de Guadassuar (CV-50) formaba parte de un proyecto mayor denominado variante sudoeste de Alzira, una segunda ronda de circunvalación que arrancaba en la rotonda del Molí Borrego para ir a buscar a través de Vilella la misma CV-50 a la altura del Pont de l'Estret, en la carretera de la Barraca, que quedó paralizado ya que requería una inversión muy elevada. La otra opción que se ha llegado a barajar para conectar Carcaixent con la autovía es mejorar la carretera que por la ermita de Sant Roc comunica con Alberic.

«Poner la llave en el cerrojo»

Ya en el informe previo que está a punto de conocerse la conselleria ha realizado una inversión económica considerable, por lo que el ejecutivo carcagentino de Paco Salom aduce que ahora sí se puede considerar el proyecto iniciado. Sin embargo, los trámites administrativos ligados a los reiterativos informes de idoneidad harán que los meses pasen y la solución definitiva para el «embudo» de Carcaixent se retrase. «Un expediente tan largo es normal que se alargue en el tiempo pero nosotros considerábamos que lo importante era poner la llave en el cerrojo. Antes sólo se hablaba pero no se concretaba nada. No teníamos nada. Ahora sí», argumenta el alcalde carcagentino, Paco Salom.

Compartir el artículo

stats