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Alginet ya instaló cámaras en el cementerio hace un año tras registrarse hurtos

El robo de búcaros, una escalera y alguna cruz llevó al ayuntamiento a vigilar el camposanto La grabación permite identificar a sospechosos

Alginet ya instaló cámaras en el cementerio hace un año tras registrarse hurtos

El Ayuntamiento de Alzira ha decidido instalar cámaras de vigilancia en el cementerio tras el último acto de vandalismo ocurrido el sábado, cuando se detectó que alguien había golpeado y roto las fotografías de los difuntos de 37 lápidas, pero hay otros camposantos en la comarca que ya disponen de este sistema de control. Alginet las instaló hace casi un año tras una sucesión de quejas por pequeños robos, aunque no por una acción vandálica tan grave como la sucedida en Alzira, según admite el alcalde, Jesús Boluda. «Cosas graves no han pasado, se trataba de pequeñas acciones que generan malestar», indicó, mientras enumeraba hechos como el robo de un florero, una escalera o alguna cruz.

Las cámaras instaladas en el cementerio de Alginet ofrecen imágenes de todas las calles interiores. «Se queda todo grabado y si pasa algo podemos ir a revisarlo», explicó Boluda. El alcalde comentó que este sistema de vigilancia ha servido para identificar al autor de algún pequeño hurto. «Son tonterías, en este caso se le llama la atención y ya está, lo que le provoca incluso vergüenza al autor, si fuera algo más grave ya se actuaría de otra forma», agregó.

El Ayuntamiento de Alginet solicitó en su día permiso a la delegación del Gobierno para instalar este sistema de vigilancia y, según expuso Boluda, «no nos puso problemas», comentó. El alcalde recordó que se decidió montar las cámaras hace aproximadamente un año en lugares estratégicos para controlar todas las calles tras recibir «muchas quejas» de gente por estos pequeños hurtos.

El robo de búcaros, flores, escaleras u otros elementos decorativos que los familiares y amigos depositan en las tumbas de sus difuntos es un hecho bastante frecuente en los cementerios. Se trata de pequeños robos que, no obstante, generan un profundo malestar en los afectados por su elevado valor sentimental. El Ayuntamiento de Villanueva de Castellón realizaba hace escasamente un mes un llamamiento para que cualquier persona que pudiera presenciar un robo de estas características lo denunciara tras las repetidas quejas de vecinos. La concejal responsable del cementerio, Teresa Fuster, admitía entonces que se había planteado la instalación de cámaras. La edil explicó ayer que, si bien este tipo de acciones «va a temporadas», la situación se había normalizado, aunque reiteró que no descartaba este sistema de vigilancia si se volvía a repetir al situación. «A una mala, pondríamos las cámaras; lo que ha pasado en Alzira es una aberración», comentó Fuster.

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