«Los problemas crecen» es el nombre de una popular serie televisiva de los ochenta aunque también podría ser el título de la biografía más reciente del colegio de educación especial Carmen Picó de Alzira. El centro descubrió ayer un nuevo agujero en el techo mientras otro se mantiene a la espera de reparación desde hace casi cinco meses. El primero de los boquetes ha causado una gran cantidad de inconvenientes durante los distintos episodios de lluvias de los últimos meses, ya que las precipitaciones ocasionan goteras. Éstas han mantenido inutilizada un aula y un aseo debido a las filtraciones y tanto el jueves como ayer se tuvieron que sacar de nuevo los cubos para recoger el agua. La presidenta de la Asociación de Padres y Madres de Alumnos, M.ª José Balaguer, reclamó «un compromiso» por parte de Educación en forma de fecha para las reparaciones que necesita el centro y no descartó la posibilidad de salir a la calle a manifestarse.
El Carmen Picó amaneció ayer con un nuevo agujero en el techo, de una superficie aproximada de dos metros cuadrados, de modo que ya son dos los boquetes, uno en cada vertiente del tejado a dos aguas. Aunque el centro no descarta que exista alguno más o que se produzcan nuevos desperfectos en el futuro si no se realiza una intervención. El primero de ellos se ubica sobre un aula y un cuarto de baño y en los pasados meses ambas estancias se cerraron debido a las goteras. La dirección del centro tuvo que sacar a los alumnos de su clase ya que «el agua caía a chorros por encima de la pizarra digital», recuerdan en el colegio. El segundo, más reciente y de mayor tamaño, está situado sobre el gimnasio, aunque las débiles lluvias de los últimos días todavía no se han filtrado lo suficiente para provocar goteras en las instalaciones deportivas.
Un técnico del ayuntamiento fue el encargado de encontrar el primero de los agujeros allá por el mes de diciembre. En el colegio se notó un incremento de las goteras pero nadie lo asoció a un boquete en el techo. El centro se puso de inmediato en contacto con la Conselleria de Educación, que envió a un técnico para comprobar los desperfectos. Pero casi cinco meses después nadie se ha personado en el Carmen Picó para reparar el tejado, que ahora se encuentra todavía más deteriorado.
Otras deficiencias
No obstante, este es sólo uno de los muchos problemas que arrastra el colegio. El centro y los padres y madres han reivindicado en diversas ocasiones el retraso que padecen con respecto a la remodelación del parque infantil que, según explican, esperan desde hace más de un año y que, por el momento, tampoco se ha materializado pese a las promesas.
Otro de los inconvenientes del centro, que ha motivado múltiples quejas, es la existencia todavía de elementos de fibrocemento. No obstante, el concejal de Educación de Alzira, Pepe Grau, se reunió recientemente con un alto cargo del Consell para tratar dicha cuestión y ambos marcaron 2017 como plazo para retirar la uralita de esta y otras instituciones educativas locales. El colegio también tiene desperfectos en una pista deportiva y en el suelo cercano a las moreras. «El Carmen Picó está adquiriendo muy mala imagen por esta cosas, necesitamos una mayor voluntad política para resolver los problemas, si no saldremos a la calle a reivindicarnos», sentenció Balaguer.
