La resolución del Ayuntamiento de Alzira por la que se compromete a aumentar la potencia contratada si la instalación de los equipos de aire acondicionado lo requiere y a asumir el coste energético que estos generen allana el camino para que el colegio, inaugurado hace apenas nueve años, pueda solicitar formalmente a la Conselleria de Educación la autorización para montar la climatización, pero la decisión última la tiene la dirección territorial. «El ayuntamiento ha dado el visto bueno y no va a poner pegas, pero no podemos asegurar nada hasta que no llegue la resolución de la dirección territorial», comentó el edil de Educación, Pepe Grau, quien advirtió de que la conselleria no recomienda la instalación de aire acondicionado en los colegios.
Tras la suspensión de las clases durante una ola de calor registrada en mayo de 2015 por las altísimas temperaturas que se alcanzaban en las aulas de este colegio construido con estructuras prefabricadas, una de las primeras medidas del nuevo gobierno municipal -las elecciones de ese mes de mayo propiciaron un cambio en el ayuntamiento- fue aprovechar el verano para abrir siete ventanas en un ala del edificio con el objetivo de propiciar una ventilación cruzada que redujera la temperatura en las aulas. Esta obra supuso una inversión de 9.500 euros que costeó el ayuntamiento.
Con el inicio del nuevo curso en septiembre, el colegio complementó esta medida con la instalación de ventiladores en las aulas, si bien ya entonces se contemplaba la instalación de equipos de aire acondicionado como la solución más efectiva.
La dirección del colegio Glòria Fuertes se dirigió el pasado mes de marzo al Ayuntamiento de Alzira para recabar los informes que, según el protocolo establecido, se han de presentar junto a la solicitud de autorización que se dirija a la conselleria, unos compromisos que el gobierno municipal ya ha asumido formalmente.
