Muchos vecinos de Alginet aún recuerdan a Ismael Latorre (1920-2011) con la cámara al cuello. El fotógrafo bautizado por el escritor local Urbà Lozano como el «notario gráfico de Alginet» tomó sus primeras imágenes en 1935 con apenas 15 años de edad y, con el paréntesis provocado por la Guerra Civil y las estrecheces de la época -montó su primer laboratorio en 1945-, prácticamente ya nunca dejó de fijar el objetivo en todo aquello que llamaba su atención. Convirtió su afición en su profesión y si bien se ganaba la vida como fotógrafo de celebraciones y fiestas, su verdadera pasión fue la fotografía documental. Ejerció también como corresponsal del periódico Levante, en el que publicó su primera instantánea en el año 1942, y dejó un archivo con más de 300.000 negativos -ampliado con las fotografías de estudio que hacía su mujer, Laura Canet, y las aportaciones de sus dos hijos Gerard y Carolina Latorre- que es un auténtico tesoro con imágenes todavía inéditas.

El trabajo realizado durante más de sesenta años -se jubiló en 1984, aunque su producción continuó hasta el año 2006- tiene un valor etnográfico incalculable ya que retrata la forma de vida, las costumbres, las fiestas de su entorno más próximo, así como la evolución del municipio en el que centró gran parte de su trabajo, aunque no se limitó a él. Sus descendientes, como gestores de legado de Ismael Latorre Mendoza, han liberado en los últimos meses algunas de estas imágenes en un proceso de dar a conocer la obra de Latorre «y colaborar de alguna forma con la cultura de la Ribera y del país», explica Vicenç Torres, representante legal del archivo.

El criterio para regalar al gran público estos «flashes» costumbristas son varios, explica Torres. Por una parte, la colaboración con el Ayuntamiento de Alginet al que se ceden imágenes para ilustrar algunas publicaciones se convierte en ocasiones en un primer paso para, una vez una imagen que se considera interesante ya es conocida, liberarla para ampliar su difusión y que otros medios o instituciones puedan hacer uso de la misma. Otras veces, la decisión se toma simplemente por complementar información que aparece en internet, principalmente en wikipedia, sin imágenes que sí figuran en el archivo de Latorre, o por colaborar con colegios e institutos.