La candidata del grupo independiente Gent d'Antella, Emília Ortiz, se convertirá el viernes en la nueva alcaldesa de la localidad en virtud del pacto de gobierno alcanzado con el PSOE tras las últimas municipales que contemplaba una alcaldía compartida. La socialista Mª Amparo Estarlich, que ha ostentado el cargo en la primera mitad del mandato, formalizó el lunes su renuncia y el viernes se completará el traspaso de poderes en el pleno de investidura que tendrá lugar a las 20 horas.
Se trata del cuarto municipio que cambia de alcalde en poco más de un mes en la Ribera como consecuencia de los pactos de gobierno y el quinto en lo que va de legislatura tras los relevos registrados en Turís, Senyera, Catadau y Alginet. En el caso de Antella, se repite la coalición que gobernó en la anterior legislatura, si bien en aquel momento el grupo independiente presidió la corporación en la primera mitad.
Emília Ortiz encabezó en mayo de 2015 la lista de Gent d'Antella Unida por primera vez tras una trayectoria política singular ya que, sin haber militado en ningún partido, concurrió a las primeras elecciones municipales en 1979 en las listas del Partido Comunista, sin obtener escaño en el ayuntamiento, y en 1995 fue concejal formando parte de la candidatura del Partido Popular que entonces lideraba Vicente Frígols, en ambos casos como independiente, remarcó ayer y sin tener que someterse a la disciplina de grupo en la votación.
«No tengo vergüenza de decirlo, pero en aquel momento pensaba que el pueblo necesitaba un cambio, vinieron a hablar conmigo y pensé que podía aportar algo», relató ayer Ortiz, que se define como una persona de izquierdas y que tras la experiencia como concejal en la oposición no volvió a repetir en el PP ya que, según comentó, no se sentía cómoda.
La próxima alcaldesa de Antella se dedica a la agricultura -es ingeniera técnica agrícola de formación- y gestiona esta concejalía en la actual coalición de gobierno. Emília Ortiz comentó que el pacto ha funcionado bien -«por suerte nos hemos respetado mutuamente», dijo- y de cara a los próximos dos años mostró su voluntad de, en la medida de lo posible, potenciar este sector y atender otras necesidades de la localidad como la sectorización de la red de agua potable para evitar fugas y que cuando éstas se produzcan no se tenga que cortar el agua en todo el casco urbano, como hasta ahora, o acometer las obras de modernización del auditorio municipal, además de mejorar los caminos rurales o el polideportivo.
La nueva alcaldesa asumirá junto al bastón de mando la dedicación exclusiva que hasta ahora percibía Estarlich con una retribución bruta de 1.500 euros mensuales. Ortiz subrayó que el gobierno rebajó el salario que percibía el alcalde con anterioridad y que el resto de concejales no recibe ninguna remuneración.
