El Síndic de Greuges ha dado la razón al gobierno de Cullera (PSPV-PSOE/Compromís) después de que el PP presentara en enero una queja a este organismo asegurando que el ejecutivo local, supuestamente, no ponía a su disposición los medios necesarios para que esta formación llevara a cabo su labor de oposición. Más concretamente, los populares reclamaban un despacho en las oficinas municipales donde se encuentra la alcaldía, pese a que ya cuentan con uno propio con todos los medios necesarios en el edificio de Servicios Sociales, ubicado a menos de 68 metros del central. La queja no ha convencido al Síndic, quien tras realizar las pertinentes comprobaciones concluye que «no se desprende que la actuación del Ayuntamiento de Cullera haya vulnerado alguno de los derechos, libertades o principios reconocidos en la Constitución Española y el Estatuto de Autonomía».

El Síndic se ampara en el hecho de que el ejecutivo municipal otorgó a principios de legislatura un despacho individual a cada grupo político de la oposición en el citado bloque de Servicios Sociales. Las oficinas se han habilitado con todos los medios informáticos necesarios para poder desarrollar la labor de oposición. Además, los concejales de la oposición disponen de espacios de reunión comunes en las oficinas centrales para poder consultar los expedientes, con pleno respeto a la ley. De hecho, era la primera vez en la historia del municipio que, desde el primer momento, el gobierno municipal habilitaba una oficina individual para cada grupo opositor. El emplazamiento en el edificio de Servicios Sociales y no en el de la Alcaldía es debido a la evidente falta de espacio de un inmueble que data de los años 70 y que fue concebido inicialmente como sede de la empresa de aguas potables. Provisionalmente, se decidió emplazar allí las oficinas municipales, aunque acabó convertida en perpetuidad con los consiguientes problemas de distribución e infraestructuras. De hecho, los distintos departamentos municipales se encuentran diseminados en más de siete edificios, algunos de ellos situados a más de 1 kilómetro de distancia. Es el caso de Servicios Exteriores, Cultura, ADL, el retén policial o Recaudación.

El alcalde de Cullera, Jordi Mayor, se mostró satisfecho por el cierre del expediente y señaló que el gobierno local «ha demostrado desde el minuto cero la máxima predisposición a facilitar el trabajo de la oposición, muy al contrario de lo que hemos sufrido los dos grupos gobernantes cuando estábamos fuera del Gobierno».