Cullera ha pedido al Consell que autorice la quema controlada de la paja del arroz para esta campaña 2017, al igual que ha sucedido en las dos temporadas anteriores. La decisión, apropuesta del PSPV, se tomó por unanimidad en el pleno ordinario de junio celebrado el martes. El ayuntamiento justifica la solicitud en la inexistencia de una alternativa viable que permita luchar contra las plagas que afectan al cereal y que provocan graves perjuicios a los arroceros.

La primera autoridad local, Jordi Mayor, recordó durante el debate que las posturas dentro de la propia conselleria de Medio Ambiente sobre la autorización no son unánimes pero remarcó que mientras no existan otros métodos menos dañinos para el medio ambiente y los cultivos «debemos ponernos al lado de los productores arroceros y no de perfil».

En los últimos años el cultivo del cereal que se cultiva en gran parte de la superficie del Parque Natural de la Albufera se ha visto amenazado por malas hierbas, enfermedades, plagas y fenómenos como la anoxia. La más importante de ellas ha sido la Leersia oryzoides, una plaga que se ha extendido rápidamente por el arrozal, un hábitat idóneo que junto con las restricciones fitosanitarias han contribuido a que se propague con facilidad.

El consistorio cullerense destaca que hasta la fecha solamente la quema de la paja del arroz se ha mostrado efectiva para frenar sus efectos. Después de que la Unión Europea prohibiera el uso de ciertos herbicidas, el único método eficiente para frenar a la Leersia Oryzoides es la quema «ya que esta práctica permite eliminar la gran cantidad de semilla que produce y que se propaga fácilmente por el agua».

El concejal de Agricultura y portavoz de Compromís, Hugo Font, subrayó durante el debate plenario la necesidad de que el Consell Agrari vuelva a pronunciarse sobre este asunto, ya que que la medida adoptada el año pasado fue de carácter «provisional». Font anunció que en la próxima reunión del Consell Agrari Municipal se abordará el tema y se comprometió a informar a la corporación de cuanto se decida en la próxima sesión plenaria.