Las previsiones realizadas durante la primera parte del verano han acabado incluso por superarse. El Castillo de Cullera, uno de los centros turísticos más relevantes de la comarca ribereña, ha vuelto a batir su propio récord de visitantes. La fortaleza ha llegado a los 5.200 visitantes este agosto, lo que supone un incremento de más del 6 % respecto al mismo período de 2016, según los datos recopilados por la concejala de Patrimonio Histórico, Amparo Jover. En el conjunto del verano son 12.000 las personas que han pasado por el emblemático monumento.
En junio fueron 3.032 los visitantes mientras que en julio la cifra alcanzó las 3.833 personas.Algunos de los factores que explican este crecimiento son la gran afluencia de turistas atraídos por la majestuosidad del lugar sumado a las rutas históricas que van desde la Vila hasta el Castillo y todos los actos culturales como conciertos y exposiciones que el ayuntamiento organiza allí. De este modo, el castillo cullerense, que también alberga el Museo Municipal de Historia y Arqueología ahora incluido en la red de Museos Iberoamericanos, se afianza como el monumento más visitado de la Ribera y se sitúa entre los castillos más atractivos para el turista en la Comunitat Valenciana.
Jover explicó ayer durante una comparencia para mostrar los resultados de la oferta turística que el número de visitas ha ido aumentando a lo largo del verano, tanto las de grupos como las individuales. Además, hizo hincapié en la importancia que tiene el castillo para la economía local dada la gran afluencia de turistas que atrae que, posteriormente, consumen los productos y servicios de la localidad.
Crecimiento anual
El castillo de origen árabe y que data del siglo X es la joya de la corona del rico patrimonio cullerense y, después de las playas, el espacio más visitado de Cullera. Desde que fuera restaurado y abierto al público en 2011, su crecimiento ha sido exponencial.
Ya en 2015, el Castillo de Cullera batió récords de visitas al lograr las 26.175 frente a las 24.905 del año anterior. El año pasado, 2016, superó los 30.000 visitantes. Ahora queda esperar a que finalice el año para ver los datos de 2017. Durante todo el mes de septiembre, la emblemática fortaleza puede visitarse por las mañanas de 10 a 13 horas, y por las tardes de 17:30 a 20:30 horas de martes a sábado.
Es una construcción de la época califal, un monumento declarado Bien de Interés Cultural. Tiene además un carácter legendario dado que durante la reconquista cristiana resistió a los intentos de asalto del Rey Jaime I, quien solo pudo obtenerlo en 1239 tras la capitulación de los musulmanes.
