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La variante de Favara deberá esperar a que acabe la obra de la A-38 en 2020

La alcaldesa exige un nuevo proyecto para solucionar los impedimentos medioambientales

Favara soporta el paso de miles de vehículos diarios, lo que se intensifica en verano. vicent m. pastor

Las esperanzas de los vecinos y vecinas de Favara se desvanecen. El diputado de Carreteras de la Diputación de Valencia, Pablo Seguí, confirmó el jueves durante una visita a la localidad que las soluciones para el numeroso tráfico que cruza Favara sólo se podrán emprender cuando finalicen las obras de adecuación de la N-332. La afirmación se traduce en que no habrá solución hasta 2020, como mínimo, ya que el Ministerio de Fomento ha retrasado por la falta de fondos la finalización de la carretera que solucionará el importante problema que se crea en la A-38 todos los veranos y que provoca que se sitúe en la zona una de las carreteras con mayor siniestralidad de España, un auténtico punto negro que acumula numerosos accidentes mortales.

Los vecinos de Favara llevan ya más de veinte años reivindicando una variante que saque de la localidad el tráfico que en verano se desplaza hasta las zonas turísticas de la comarca ribereña. «No quiero ni una sola muerte más. Lo único que pido de las administraciones provinciales, autonómicas y nacionales es que se dé, de una vez por todas, una solución a este conflicto en el que se lleva trabajando desde el año 1993», le transmitió la alcaldes de Favara, Oro Azorín, al diputado provincial durante su visita. Seguí se comprometió con el consistorio de la Ribera Baixa a trabajar de forma firme para buscar soluciones que acaben con el grave problema que se vive en Favara, en especial en verano y durante la época estival. «El departamento de Carreteras de la Diputación está manteniendo, de forma constante, conversaciones con el Ministerio de Fomento para intentar trabajar en posibles soluciones. Aunque desde el ministerio no se han dado hasta ahora posibles soluciones. Todo hace indicar que antes de la finalización de las obras de la A-38, en el año 2020, las soluciones van a ser muy complicadas», afirmó Seguí.

Favara exige más iluminación en los pasos de peatones, reubicación de uno de ellos, instalación de un semáforo por el paso que acceden mayoritariamente los escolares y adecuación de la seguridad a la zona del ayuntamiento. Además, en el mes de marzo de 2017 ya se le hizo entrega a la delegación de Carreteras de la diputación de un estudio técnico sobre una deficiencia de drenaje encontrada a raíz de las últimas lluvias torrenciales. Seguí se comprometió a buscar soluciones para dichos problemas antes de final de año.

La diputación quiere mejorar el vial con un by-pass que saque el tráfico del municipio pero se está encontrando serios problemas medioambientales y con el peaje de la autopista. La alcaldesa adujo que si para poder sacar la carretera «es necesario realizar un proyecto nuevo que sustituya al de 2011, el cual está paralizado por problemas medio ambientales, exigimos uno nuevo ya» para evitar el peligro sobre los vecinos.

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