Gómez destacó que el evento suponía un hermanamiento entre Alzira, el río Xúquer y Algemesí. «Alrededor de un mismo lugar, junto con la escultura, confluyen tres sitios característicos de la comarca: nuestra ciudad, Algemesí y nuestro río, del que hemos de aprovecharnos y no vivir de espaldas, sino de cara», afirmó el munícipe.

La máxima autoridad local también se refirió a la obra como una continuidad al paseo fluvial. «Queremos abrir el río, tener espacios donde la gente pueda disfrutar y se sienta identificada como pueblo. En el consistorio hemos hecho un gran esfuerzo para convertir este proyecto en una realidad», sentenció Gómez.

Más proyectos en mente

También intervino el concejal de Servicios Públicos, Fernando Pascual, que se encargó de explicar cuáles han sido las mejoras que se han realizado para adecuar la zona, y Bernat Montagud, doctor en Ciencias Históricas y académico de Bellas Artes. «De los 32.000 metros cuadrados que tenemos disponibles, hemos intervenido en 18.000. Tenemos más proyectos sobre la mesa que, a medida que avance el tiempo, los iremos valorando. Esperemos que este espacio se pueda conservar y mantener por mucho tiempo», explicó Montagud. Asimismo, el catedrático hizo un llamamiento a la convivencia. «Hay una zona habilitada para las mascotas. El césped es para que los niños puedan jugar y tumbarse sin mayores problemas. Además, hay un sitio de pícnic para que la gente traiga la comida», manifestó.

El último en cerrar el acto fue Vicent Borrás, hijo del artista Leonardo Borrás, que se mostró satisfecho «de ver que el proyecto que mi padre tenía en mente y que se remonta a más de diez años, se ha convertido en una realidad tras un largo periodo de espera».