Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un restaurante de Barx cocina el mejor puchero

? Beatriz Ballester da el título del concurso de l'Alcúdia al bar La Visteta ? Paco Gimeno, del Racó de Meliana, repite victoria en el postre con caqui

El premio al mejor puchero viaja este año hasta Barx, en la Safor. Beatriz Ballester Blasco consiguió el punto más sabroso para el jurado de la que suponía la décima edición del Concurs de Putxero Valencià que todos los años se celebra en l'Alcúdia, como continuación de la feria gastronómica. Participaron en total dieciocho restaurantes de rincones diversos del territorio como Cullera, Riola, Gandia, Siete Aguas, Nazaret, Serra o Llombai. La representante del Restaurante La Visteta (situada en la carretera entre Barx i Simat) adujo que lo más importante de su elaboración fue la utilización «de productos de primer nivel, porque el cariño es decisivo pero más lo es usar materias primas de calidad. Con ello conseguimos un cocido muy consistente».

Ballester dijo ceñirse a la receta tradicional, sin añadidos, tal como siempre la ha visto elaborar en las casas valencianas. Tal vez su punto diferencial es que practica con dicho manjar a diario, ya que lo ofrecen en la carta de su establecimiento culinario. No es usual. El Restaurante La Visteta participa desde hace diez años en la cita alcudiana y en anteriores ediciones consiguió varios segundos puestos. Este año ha culminado su fidelidad al concurso con la victoria.

La segunda posición del certamen fue para el Restaurante Chef Amadeo de la Platja de Gandia, mientras que fue tercero Gambrinus de Siete Aguas.

Más creatividad permitía el torneo de postres, en el que era necesario utilizar uno de los productos estrellas de la localidad ribereña: el caqui. Por segundo año consecutivo se llevó la victoria el cocinero Paco Gimeno Ferrando, del Racó de Meliana, situado en la calle de Les Glòries Valencianes.

El chef elaboró un plato con queso mascarpone y láminas de caqui, cubierto por gelatina del fruto ribereño y piñones. Una almendra crujiente completaba un postre repleto de caqui y sabores complementarios.

«No es fácil elaborar un postre con caqui porque es un producto muy complicado que puede perder mucho sabor si usas determinados complementos. Sin embargo, he visto mucho nivel en el concurso, con platos visualmente muy atractivos», explicó Paco Gimeno a este periódico tras conocer su título. Acabó segundo el restaurante l'Albereda de València y tercero Llopis de Sueca.

Compartir el artículo

stats