El Ayuntamiento de Sueca y la Generalitat rehabilitarán el antiguo matadero para convertirlo en un centro de día para mayores. Así lo confirmó ayer la directora general de Servicios Sociales y Personas en Situación de Dependencia, Mercé Martínez, durante una visita a la capital de la Ribera Baixa para conocer de primera mano estas instalaciones que el gobierno local tiene intención de convertir en centro social para mayores y para personas enfermas de alzheimer.

La alcaldesa de Sueca, Raquel Tamarit; la concejal de Acción Social, Noelia Sisteró, y el edil de Urbanismo y Obras Públicas, Julio Serra, explicaron el proyecto a la directora general con el objetivo de conseguir el apoyo de la Generalitat. La directora general valoró la iniciativa municipal como un proyecto «motivador y emprendedor». «Ésta es una necesidad que tiene Sueca y que su alcaldesa ha recogido perfectamente a través de su equipo de Servicios Sociales que está trabajando muchísimo por esta demanda que existe, una demanda latente y potencial. Realmente considero que hay que darle cabida dentro de la Ley de la Dependencia», señaló la directora general.

Con estas palabras, Mercé Martínez confirmaba el compromiso de la Generalitat en hacer efectivo este proyecto. De esta manera, según el acuerdo alcanzado, el ayuntamiento asumirá la reforma del edificio, ya que se compromete a rehabilitarlo de forma que se convierta en un centro homologado por la Generalitat, mientras que la conselleria asumirá la financiación de las nuevas plazas del centro de día.

Sisteró justificó el nuevo uso de este edificio que, inicialmente, se preveía convertir en un albergue juvenil. «Hemos priorizado el uso del edificio atendiendo las necesidades de nuestra población», apuntó la titular de Acción Social, mientras señalaba: «la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer ha crecido notablemente en los últimos meses y cada vez tiene más gente que necesita de este servicio. Como administración pública sentimos que tenemos que dar una solución, en primer lugar a estas personas, también a nuestros mayores en general, porque no tienen por qué ir a una residencia internos si no lo necesitan. Tanto el ayuntamiento como la conselleria coincidimos en la idea que la gente no tiene por qué estar apartada, nuestro interés es que nuestros mayores estén integrados, que no tengan que abandonar su entorno y trabajamos para dar el apoyo en nuestras familias porque esto sea posible».