Los ayuntamientos han tenido que reducir inversiones durante los años de la crisis, pero no han podido eludir el destinar fondos para la ampliación de los cementerios. Hasta nuevo aviso, la gente sigue muriendo. Alzira cuenta con una media de unas 320 defunciones al año, lo que se traduce en una inversión constante en el cementerio, como explicó el edil Fernando Pascual. Se estima en 200 los nichos que se construyen cada año, o lo que es lo mismo, unos 200.000 euros anuales. Este año, que también se ha incorporado una importante subvención, el camposanto alcireño ha recibido una inversión de 300.000 euros. Sueca tiene como particularidad que acoge en su camposanto a los difuntos tanto de la localidad como del Mareny y El Perelló, así que su inversión también es constante. Desde 2015 hasta este año, el consistorio ha construido 198 nichos y 10 columbarios, lo que representa una inversión de casi 400.000 euros. Además, de cara al próximo año se llevará a cabo una ampliación, ya que el cementerio actual se ha quedado pequeño.
El caso de Cullera es uno de los más particulares de la comarca. La situación económica de la localidad costera es muy delicada y se encuentra sometida a un estricto plan de ajuste que impide al ayuntamiento realizar inversiones con fondos propios. De hecho, el único apartado en el que sí puede hacerlo es en la construcción de nichos. Desde 2015, año de cambio en el ejecutivo local, se han destinado 184.000 a este cometido, lo que ha permitido ampliar el camposanto con 147 nichos, una buena parte de ellos son dobles. En estos momentos, hay 50 que están en fase de construcción y el cementerio dispone de 64 nichos dobles y 100 columbarios. El consistorio también trabaja en la puesta en valor del cementerio civil y también ha realizado labores para mejorar la accesibilidad.
Por su parte, Carcaixent ha construido 180 nichos y 60 columbarios en los últimos dos años, repartidos en dos inversiones, una en 2015 (84.000 euros) y otra en 2017 (91.000 euros). Paralelamente, el ayuntamiento ha realizado la ampliación de los lindes del cementerio y también ha invertido en mejorar la accesibilidad de las personas con movilidad reducida y se han incorporado sillas eléctricas para poder acceder a las dos alturas (lo que ha supuesto a las arcas municipales más de 260.000 euros). Además se ha acondicionado la parte trasera del camposanto para que haya un mayor aparcamiento de cara a Todos los Santos.
Algemesí ha llevado a cabo la construcción de 248 nichos en el cementerio municipal. El trabajo se ha complementado con la urbanización definitiva del espacio de esta instalación que todavía no se había llevado a cabo. El consistorio ha invertido un total de 346.000 euros. De total 290.000 euros se han destinado a la construcción de nichos y 56.000 a la urbanización pendiente del recinto. La novedad será apostar por un cambio de modelo para dignificar y dar un mayor protagonismo a las zonas destinadas a acoger las cenizas. Además, el proyecte prevé la construcción de dos zonas más donde poder depositar las cenizas dentro de un ambiente natural. Serán, según el concejal de Medio Ambiente y Urbanismo, Pau Montalvà, «El bosque de la memoria» y «El jardín de la libertad», dos espacios ajardinados para poder dejar las cenizas de los difuntos. Todo ello se podría complementar con la construcción de un crematorio, un aspecto todavía en fase de estudio.
Almussafes construyó hace un año treinta nuevos nichos en el camposanto local con los que se garantizó espacio de sepultura suficiente para los próximos cinco años. El coste total de la inversión ascendió a 43.797 euros. Además, invirtió 28.000 euros en la construcción de una nueva solera de hormigón armado lindante a la necrópolis para mejorar el acceso, aceras y rampas seguras.
En Alberic la inversión en los últimos tres años asciende a aproximadamente 300.000 euros. La última obra, a cargo del ayuntamiento, ha supuesto la creación de 104 nichos y 64 columbarios, con una inversión de unos 60.000 euros. Se ha construido una nueva zona de expansión de la necrópolis.
Por su parte, Benifaió acometió recientemente la edificación de tres bloques de nichos, osarios y columbarios en una reciente zona ampliada del cementerio que ocupa 188 m2. Las obras, que supusieron una inversión de 153.940 euros, constan de 126 nichos, 48 osarios y 60 columbarios dividas su construcción en tres fases.
Montserrat realizó un total de 120 nichos en el 2016 con los que queda cubierto para el próximo año. En Alginet, el consistorio ha invertido 47.000 euros para construir 57 sepulturas. Al mismo tiempo, se han cambiado los aseos y se ha instalado una nueva zona de jardín. Carlet ha destinado 120.000 euros en los dos últimos años para cimentar 120 nichos. También se ha hecho un aparcamiento nuevo y se han mejorado los jardines. En l'Alcúdia, el consistorio ha materializado un total de 196 tumbas y de cara al 2018, está previsto iniciar las obras de un cementerio civil al lado del tanatorio municipal.
