La ejecutiva del Partido Popular de la Ribera Alta ha mostrado su apoyo firme al exalcalde de Alginet condenado por los vertidos fecales de la urbanización Los Lagos a un barranco. El presidente comarcal del PP, Rafael Soler, ha anunciado que el partido estudiará la forma de prestar su apoyo de manera jurídica a Enrique Girona.
La situación del exmunícipe fue uno de los puntos tratados en la última reunión de la ejecutiva comarcal. «Por supuesto, respetamos la decisión de la justicia, pero hablamos de una grandísima persona que fue condenada por algo de lo que no era del todo responsable, lo suyo habría sido que se condenara a todos los alcaldes o bien que esto no ocurriera con ninguno», expresó Soler, mientras añadía: «Por suerte, la condena fue a un año y medio, así que no pisará la cárcel, eso habría sido un duro golpe».
El dirigente popular recordó que la problemática de Los Lagos «se inicia hace casi 40 años y Enrique fue alcalde algo más de cuatro años». Si bien es cierto que la sentencia condena a Girona por un delito «por omisión», Soler rompió una lanza en su favor: «Todo el mundo sabía que esa urbanización funciona como funciona, a día de hoy tampoco se ha resuelto el tema del alcantarillado. Enrique se encontró con una situación en la que poco podía hacer, la empresa decía una cosa, habían proyectos que no valían y no se podían llevar a cabo y los vecinos querían otro proyecto. Cuando se detectó uno de los vertidos en la casa de una vecina, él actuó como debía y se limpió», afirmó Soler.
Con todo, pese a manifestar su apoyo a Girona, la ejecutiva no acordó materializarlo de manera concreta. «De momento lo hemos aplazado, por ahora estudiaremos el tema y miraremos cuál es la forma jurídica en que podemos ayudarle», señaló.
La reunión de la comarcal, que contó con la presencia del presidente de la gestora provincial del PP, también abordó la finalización del contrato de Ribera Salud y el cambio de gestión que se producirá a partir del próximo mes de abril, fecha en la que el Consell asumirá de manera directa el hospital de Alzira.
«El tema es muy ambiguo porque se deteriorará la calidad asistencial, el servicio empeorará. Además, hay que tener en cuenta que las listas de espera son más cortas en el hospital de la Ribera que en otros que gestiona la conselleria de Sanidad», manifestó Soler. El PP anunció la semana pasada que coordinará acciones en todos los ayuntamientos de la Ribera Alta para instar al Consell a mantener la cartera de servicios, pese a que no se ha anunciado la desaparición de ninguno de los especialistas del hospital.
