Las catas arqueológicas realizadas en el castillo de Corbera han encontrado por debajo de la muralla árabe -los expertos datan la construcción entre los siglos XI y XIII- una fortificación anterior que abre muchas expectativas por la gran importancia defensiva o militar que tuvo esta edificación. Hasta el momento se tenía constancia de la fortaleza musulmana, pero los últimos sondeos han permitido acceder a una construcción amurallada de la que todavía se desconoce la cronología, a falta de los estudios pertinentes. Asimismo, en la zona del aljibe han aparecido diversos arcos, bóvedas, escaleras y un suelo de cerámica en forma de espiga en muy buen estado de conservación, que podría ser del siglo XVI, junto con lozas islámicas. Otros de los hallazgos importantes ha sido el del suelo original de «las cuadras», donde también ha aparecido un esqueleto completo de un caballo.
El arqueólogo responsable de estas exploraciones, Miquel Gómez Sahuquillo, destacó «la importancia de estos descubrimientos, ya que esta nueva aparición nos está hablando de la importancia militar que tenía este enclave. La forma de las murallas, rodeando al castillo, ha hecho que los vestigios y restos de derrumbes se hayan preservado en su interior en buen estado».
Ahora, los técnicos se centrarán en el estudio y análisis del material que se ha encontrado para poder sacar conclusiones reales de esta fase de excavaciones. Por otra parte, ya se ha procedido a tapar la zona de exploración para evitar posibles expolios. «Es importante que los hallazgos se conserven en perfectas condiciones, por eso lo hemos limpiado y cerrado con la debida protección. En esta ocasión hemos utilizado lonas geotextil, que facilitarán su mantenimiento», añadió Gómez.
En esta primera fase de los trabajos solicitados por la Diputació de València, titular del castillo, se pretendía evaluar el actual estado del castillo de Corbera y analizar los restos históricos que pudiesen encontrarse. La segunda fase servirá para dar paso a un proyecto planificado y más amplio que persigue la recuperación y consolidación de esta fortaleza.
Las actuaciones se han centrado en espacios diferentes, destacando la celoquia, la parte más alta del recinto donde estaban las dependencias más típicas como los aljibes, la zona de viviendas y la torre del homenaje.
Allí se ha encontrado un posible conducto de agua y varias puertas y arcos. «Esto tiene un importante valor porque nos muestra que esta zona tenía un uso que hasta ahora desconocíamos», afirma Sahuquillo.
Esquivar el olvido
Esta construcción pasó en 2003 a ser titularidad del Área de Patrimonio de la Diputació de València. Desde entonces, los diferentes gobiernos de Corbera habían mantenido contactos con el ente provincial para que invirtiese en actuaciones encaminadas a frenar la degradación del castillo en un primer momento y lograr su recuperacoión.
Dos meses, octubre y noviembre, en los que se han realizado diferentes exploraciones para disponer de la información suficiente sobre el estado actual en el que se encuentra la edificación. «Hemos hecho cinco catas en las que se ha comprobado cómo están los componentes del castillo. Han sido unos sondeos valorativos que nos permitirán realizar una secuencia estratográfica para poder sacar las primeras conclusiones de cara a una restauración de las diferentes fases de la histórica obra», explicó el director de campo y arqueólogo, Arturo Suárez.
Estos resultados servirán de base para que, a partir del mes de diciembre, se pueda acometer una actuación de urgencia por valor de 50.000 euros, circunscrita a la ejecución de trabajos que permiten reforzar y consolidar la estructura del castillo, que a día de hoy, mantiene el castillo.
