El alcalde de Real, Alejandro Blasco, aprovechó ayer la visita de la vicepresidenta de la Diputació de València, Maria Josep Amigó, para lamentar que durante los últimos 14 años -la etapa del gobierno del PP principalmente- ningún representante público de la corporación provincial hubiera visitado el municipio pese a los diferentes intentos realizados, un ninguneo que atribuyó a la falta de sintonía política entre el gobierno municipal y el de la diputación.