Los más de 114 litros por metro cuadrado acumulados en Tous representan el mayor registro que la gota fría dejó el domingo en la Ribera, un episodio de lluvias irregulares, localmente fuertes en el interior y acompañadas de aparato eléctrico, mientras que en la costa se registraban fuertes rachas de viento que alcanzaron los 90 kilómetros por hora en el Perelló y también hizo acto de presencia el granizo.
Este temporal deja precipitaciones importantes, que cobran especial significación tras un largo período de sequía. Valga como ejemplo el caso de Alberic. La estación de la red Inforatge contabilizó el domingo cien litros por metro cuadrado -102 en el cómputo de todo el fin de semana-, una cantidad que supera el acumulado de los últimos nueve meses ya que entre abril y diciembre sólo se contabilizan 93,4 litros. El alcalde de Alberic, Toño Carratalá, dejó constancia del dato en las redes sociales ya que desde el 13 de marzo en que la estación recogió 77 litros no se había producido registros tan importantes.
Por su parte, en base a los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), los 114,2 litros registrados en Tous en un solo día representan «más del triple» del acumulado entre el 1 de septiembre y el viernes 26 de enero, prácticamente cinco meses en los que apenas se contabilizan 36,4 l/m2.
La red de Inforatge registró 96 litros en Senyera, 85 en una estación ubicada en la Serratella de Carcaixent, 78 en el núcleo urbano de Carcaixent, 71 en la Pobla Llarga, 65 litros en la Murta o 52 en el casco urbano de Alzira. El meteorólogo de Algemesí Jovi Esteve comentó ayer que el episodio del domingo fue una gota fría «de libro» y que la suerte que había tenido la comarca de la Ribera en esta ocasión es que el agua del mar estaba fría. «Si esto pasa en otoño hubiera sido muy explosivo y hubiera dejado cantidades de lluvia cuatro o cinco veces superiores», comentó. La red de Avamet también recogió 91,2 litros en Sumacàrcer, 74,2 en Villanueva de Castellón o 86,2 en Càrcer.
El meteorólogo que coordina las estaciones de Inforatge destacó que mientras la lluvia se acumulaba en el interior, la Ribera Baixa registraba las rachas de viento más fuertes e incluso precipitaciones de granizo, lo que ocasionó daños en invernaderos del Perelló, donde el viento alcanzó los 90 km/h. En Guadassuar se registraron rachas de 74 km/h, de 71 en Algemesí y de hasta 70 en Alzira, mientras que en otros municipios oscilaban entre 50 y 55 km/h. Esteve también señaló que el temporal marítimo dejó olas de tres y cuadro metros en la costa de la Ribera.
Muro caído en Rafelguaraf
El viento derribó el sábado por la noche el muro de cierre de un solar en Rafelguaraf y provocó la caída de árboles, como el pino que quedó cruzado en un camino junto a la carretera entre Sellent y Sumacàrcer.
El jefe de la sección de Climatología en la delegación de Aemet en la Comunitat Valenciana, José Ángel Núñez, explicó que el factor clave para que las lluvias se focalizaran en zonas del interior sur de la comarca fue el flujo de viento del nordeste. «Con un flujo tan fuerte de gregal, lo normal es que las precipitaciones más significativas se desplacen hacia las localidades del interior, cerca de las montañas prelitorales, que sirven para reactivar e intensificar las lluvias, mientras que en el litoral y llanuras litorales los acumulados son menos importantes», explicó.
Las lluvias del fin de semana, salvo daños muy puntuales, han sido muy recibidas por el campo debido la prolongada sequía.
