La ciudad de Cullera se ha volcado, desde el pasado domingo, con los familiares de Andrea Mengual Vallejo, la joven de apenas 18 años que murió atropellada a primera hora de la mañana del pasado domingo en el vial de acceso a Les Palmeres. Su padre ha agradecido, en nombre de toda la familia, la extraordinaria muestra de afecto recibida, aunque también admite que el golpe emocional ha sido muy duro. La familia y los amigos de la víctima están destrozados.

Muchas han sido a lo largo de los últimos días las muestras de ánimo y apoyo que la familia paterna y materna han recibido por parte de la población, unos agradecimientos tanto personales como transmitidos a través de las redes sociales que han servido para estabilizar a una familia totalmente desolada y abatida por el dolor.

Ante esta masiva exhibición de afecto, el padre de la joven, Alejandro Mengual, ha querido manifestar su agradecimiento y el de su madre, Gema Vallejo,a través de este periódico. La progenitora de Andrea reside en Francia y se desplazó a Cullera nada más conocer la trágica noticia. «La familia está destrozada, pero quiere reconocer y dar las gracias por todas las impresionantes muestras de cariño que hemos recibido en estos días tan tristes», afirma el padre, que también quiere agradecer al Ayuntamiento de Cullera la información puntual que recibió de las autoridades locales desde que se produjo el accidente.

El duelo oficial y las fallas

«Queremos manifestar nuestro profundo agradecimiento ante tanto apoyo, de gente y colectivos conocidos y no tan conocidos, en especial al consistorio por los días de duelo oficial que decretó así como a las comisiones falleras y a la Junta Local, en especial a la Falla de la Bega, donde la vinculación de la familia es muy grande», subraya el padre.

Sin embargo, pese la energía positiva que aportan las condolencias, la amargura no logra contrarrestar todo el dolor y la familia reconoce que la congoja sigue instalada en lo más hondo. Para Alejandro Mengual «el shock producido por la pérdida de Andrea tardará mucho tiempo en irse». «Nuestra hija era querida por todos aquellos que la conocían y su imagen estará siempre en nuestros corazones», asegura.