Jesús Ferrando, el joven de 22 años de Carcaixent que fue atropellado en la madrugada del domingo en Benifaió, quiso bajarse del coche en plena autovía para recuperar el móvil que se le había escapado por la ventanilla, según aseguraron a Levante-EMV fuentes próximas a los acompañantes del fallecido. Entre todos acordaron parar en la gasolinera y luego él se adentró sólo en la A-7. Sus amigos intentaron buscarle sin invadir el vial pero no lo avistaron.

El grupo regresaba de València tras pasar una noche de fiesta. Según las mismas fuentes, durante un momento de risas y bromas en el vehículo, al joven se le escapó su teléfono móvil por la ventanilla del coche, que se encontraba abierta. Al perder el teléfono, quiso bajarse del automóvil en plena autovía, pero finalmente decidieron continuar la marcha, al menos hasta la estación de servicio.

Allí se detuvieron para tratar de serenarse y analizar lo ocurrido. No obstante, Jesús estaba decidido a recuperar su celular y bajó del coche con la intención de buscarlo. Los amigos, según han asegurado a sus íntimos, se quedaron atónitos ante su insistencia. Poco después, siempre según su versión, bajaron del vehículo para buscar a su amigo, se acercaron a la autovía por el carril de desaceleración pero no lo localizaron. A lo lejos, no obstante, observaron algunas luces.

Uno de sus acompañantes regresó a la estación de servicio, alertó al dependiente de lo que ocurría y le instó a llamar a la Guardia Civil para que tuviera constancia de que su amigo se había adentrado a pie y en dirección contraria en la autovía. Los jóvenes escucharon un golpe poco después, pero no fueron conscientes del fallecimiento de su amigo hasta que las autoridades les informaron del atropello.