La Setmana de l'Economia d'Alzira bajó anoche el telón con una reivindicación conjunta de empresarios y ayuntamiento para que las Administraciones inviertan en la mejora de las infraestructuras viarias de la ciudad para corregir el déficit actual. Tanto el presidente de la AEA, Raúl Tudela, como el alcalde de Alzira, Diego Gómez, coincidieron en reclamar soluciones para el cuello de botella en que se han convertido los accesos al polígono de la Carretera de Albalat y reivindicaron una vez más la conexión directa con la AP-7 desde este polígono, una aspiración histórica de los industriales de Alzira dada la proximidad física de esta vía rápida, si bien el acceso más próximo obliga a dar un importante rodeo. Presentes en la sala se encontraban el director general de Administración Local, Antoni Such, como representante del Consell, y la presidenta del PPCV, Isabel Bonig.
La gala de la economía cerró anoche una semana de debate y reflexión para plantear soluciones a los problemas del tejido económico con la entrega de los premios con los que la AEA y el ayuntamiento han querido distinguir la larga trayectoria de un establecimiento comercial como la Joyería Revert, del empresario Pedro Andrés, un promotor del asociacionismo empresarial; y de la escudería Campos Racing, que se ha convertido en un referente mundial en la industria del motorsport.
Tras el homenaje se dio paso a los discursos. El presidente de la Asociación Empresarial reivindicó que las empresas, el comercio y los autónomos son el «motor económico» de la ciudad y que ese motor «necesita de la atención urgente de todos y, en especial, de nuestros políticos». Raúl Tudela reiteró su preocupación por la difícil coyuntura que atraviesa el comercio y anunció que, antes de finalizar el mes de marzo, entregará en el ayuntamiento un proyecto de acción inmediata para dar un primer impulso al sector que permita cambiar la tendencia actual y expresó su confianza en contar con el respaldo municipal.
Tudela, que tuvo palabras de agradecimiento a su antecesor, Pepe Villalba, reivindicó unos «accesos dignos» para las polígonos industriales y, en especial, para el de la Carretera de Albalat. También emplazó a que exista una «colaboración real» entre los representantes políticos y la AEA «como única fórmula para que este gran motor económico pueda volver a ser punto de referencia de la comarca y junto con los sindicatos podamos generar esos puestos de trabajo tan necesarios para nuestros vecinos».
El alcalde recogió el guante y reivindicó, junto a una mejor financiación de las ciudades medianas, «unas partidas presupuestarias estatales y autonómicas que refuercen las inversiones y acaben con el déficit de infraestructuras viarias y de comunicación».
