La liga de fútbol sala de 3ª división se ha puesto al rojo vivo. En un ambiente de fiesta como los que se vivían hace 25 años con los partidos de balonmano del Avidesa -con charanga y resonadores incluidos-, el Nítida Alzira FS perdió 2-4 ante el segundo clasificado, el Mislata, que se ha puesto a solo un punto de los alcireños y el 3º, el Maristas València -filial del Levante UD-, a dos. Solo en tiempos del Alzira FS en División de Honor, cuando recibió al Balnul y actuó Loco Mía, se había vivido un partido con tanta fiesta en las gradas. Eso sí, incomparable a aquel día que se llenó el pabellón. El trabajo de la actual directiva dio sus frutos y unas 500 personas daban gran colorido a las habitualmente despobladas gradas el Palau d'Esports. Y como pasó hace casi 30 años, el público se fue con el sabor amargo de la derrota.
Las ocasiones se sucedieron en ambas porterías, que tuvieron a sus arqueros como protagonistas. A cinco minutos para el descanso, un disparo de Miguel Pérez fue repelido por Abel y Guillermo Prado aprovechó el rebote para marcar a puerta vacía. Al Alzira se le atragantaba la defensa alta del Mislata y por fin, a 30 segundos para ir a vestuarios, el capitán José Carlos metía un derechazo inapelable desde diez metros y lograba el empate a 1.
Desenlace inesperado
La segunda parte empezó mal para los ribereños. Abel tuvo que hacer tres paradas en un minuto y en el 6, Miguel metió un golazo ajustado al palo. Con el control del balón de los alcireños, los mislateros marcaron el 1-3 a la contra al filo del ecuador del segundo acto. El Alzira quería lograr al menos el empate que mantuviese a los capitalinos a cuatro puntos. Pero además de un férreo equipo, los alcireños se toparon con un lamentable arbitraje. En un libre directo, José Carlos volvió a sacar el pundonor y enganchó un soberbio derechazo raso con el que batió a uno de los mejores porteros de la categoría, Julio Simón. Lo que debió ser una falta a favor del Alzira se convirtió en un doble penalti en contra que por suerte acabó en el palo. Sin embargo, a 14" para la conclusión y con portero jugador del Alzira, el Mislata logró el 2-4 definitivo.
Si el Alzira gana los once partidos que le restan será campeón de liga, entre ellos el que ha de jugar en casa del Maristas València en la penúltima jornada de liga y en la capital ribereña contra el Favara en la última. El Mislata jugará contra ambos equipos una jornada antes. Por lo pronto, este sábado el Alzira volverá a jugar en casa contra el penúltimo clasificado, el Nou Almàssera, ya con el horario habitual de las 17 horas y el Favara recibirá a l'Olleria el viernes.
