El Roquette Benifaió se descuelga definitivamente de los primeros puestos de la Primera División Nacional de baloncesto. Tras llegar incluso a la segunda posición, los rojillos han ido perdiendo fuelle y ahora son sextos después de caer ante un rival directo en dicha zona noble, el Picken Claret, que fue capaz de llevarse la victoria por 73-83 en la cancha de la Ribera. Con todo, al conjunto benifayonense parecen fallarle las piernas en el momento decisivo y ya parece muy complicado que pueda obtener una de las plazas que dan derecho a luchar por el ascenso.
Tendrá una seguro el Guillén Group CB Alginet, que sigue completando una temporada histórica. Los azulones vencieron también esta semana y ya van diecinueve seguidas. Todas las de la liga. Se deshicieron del Xàtiva, uno de los mejores equipos del grupo, nada menos que por 30 puntos. Una auténtica apisonadora está hecho el CB Alginet.
Y eso que la pista del Xàtiva es muy complicada para los visitantes.El partido comenzó con intercambio de canastas durante los primeros cinco minutos, con un inspirado Doby jugando en la posición de tres y generando anotación con cierta facilidad. A partir de ahí, los visitantes dominaron desde la defensa, con buenas ayudas y generando muchas dudas en el ataque local. En el segundo cuarto se mantuvo el nivel defensivo del Guillen Group Alginet, que seguía recuperando balones y corriendo buscando contraataques y transiciones rápidas. Al descanso se llegó con un 35-56 muy clarificador.
El tercer cuarto fue de rachas, es decir, el Guillen Group Alginet empezó anotando bastante cómodo y poniendo la diferencia en 29 puntos, pero el rebote ofensivo y los tiros libres, fruto de las faltas provocadas por sus jugadores interiores, hicieron que la diferencia bajara a 21 puntos, para volver a una última racha visitante hasta los 31 puntos.
El jugador T. Davis, en una acción espectacular, rompió el aro de su pabellón. Ante el desconcierto de todos los asistentes, el personal del pabellón informó que no había posibilidad de cambiar el aro, por lo que el equipo local, en base a la normativa de la competición, tenía dos horas para encontrar un pabellón en el que se pudiese reaunudar el encuentro. Tras muchos minutos de reuniones entre los representantes de ambos equipos y el cuerpo arbitral, se acordó cambiar al Pabellón Municipal de Xàtiva.
Pero tras desplazarse todos, allí se jugaba un partido de fútbol sala. Finalmente se decidió esperar para no volver a meter a los jugadores y al público asistente en coches. Tras dos horas desde el incidente, se continuó con el partido.
El CB Alginet no encontró rival y acabó venciendo de 30 puntos.
