La paella valenciana ha viajado, por tercera vez, hasta la soleada California. El Paella Wine & Beer festival de San Diego ha sido el escenario elegido para acoger una de las fases estadounidenses del Concurso Internacional de Paella Valenciana de Sueca, que se celebró el pasado fin de semana. Desde allí, el equipo se prepara ya para volar a Japón para organizar la siguiente semifinal internacional. Slate Wine Bar se ha coronado como ganador de la competición californiana. La plata ha sido para el establecimiento Karbo y el bronce ha recaído en El Colorense.

En un ambiente festivo, el concurso desplegó todo su atractivo bajo la mirada curiosa de centenares de espectadores. La cita, enmarcada en un festival de cultura y gastronomía española, generó largas colas de gente que esperaba degustar la paella gigante cocinada para los asistentes. En las jornadas previas, y siguiendo el formato de anteriores expediciones, Jesús Melero ofreció una «showcooking» a los participantes, incidiendo en la importancia de mantener inalterable la receta de la auténtica paella valenciana y los ingredientes originales. La delegación del concurso aprovechó su estancia en San Diego para pasar por los platós de algunas de las televisiones más importantes de la zona, donde coincidió con algunos de los chefs más populares de la otra parte del charco, como Mario Medina o Chente, de Los Ángeles.

La carrera por la Mejor Paella del Mundo de 2018 cumplirá otra etapa en unos días. El domingo el certamen aterriza en la ciudad de Nishio, en la prefectura de Aichi (Japón). Será la quinta edición en que esta clasificación se celebra en el país nipón. El jurado decidirá los mejores cocineros de paella de este año de Japón. Los ganadores, como en el resto de semifinales internacionales, obtendrán el pase directo para la final de la 58 edición del Concurso Internacional de Paella Valenciana de Sueca, que tendrá lugar el próximo 16 de septiembre.