Algemesí prevé poner coto a los solares que carecen de cerco y de unas adecuadas condiciones de salubridad. El equipo de gobierno (PSPV-EU) ha preparado una nueva ordenanza que regulará el cierre y la limpieza de parcelas. En ella se contemplan sanciones que alcanzan los 3.000 euros, en los casos más graves. Con ella, el ayuntamiento pretende contar con un marco normativo al que acogerse a la hora de reclamar a los propietarios el coste de una limpieza subsidiaria. «Muchas veces las facturas se quedan pendiente de pago», explicó el concejal de Urbanismo, Pau Montalvà, que reconoció que la medida también sirve para que el ayuntamiento «se aplique el cuento» con sus propiedades. Hasta la fecha, la localidad carece de una normativa explícita para estos casos.
Limpieza de aceras
El nuevo marco regulador, que todavía no ha sido aprobado por el pleno municipal, prohíbe que se realice publicidad en las paredes del cercado, salvo en el caso de aquellos anuncios de promociones a ejecutar en la propia parcela. En esa circunstancia, se permite hasta que finalice la obra. Asimismo, en lo que a limpieza se refiere, también se regulan los espacios públicos que se ensucian como consecuencia de una actividad económica. Es el caso de bares o grandes superficies, que deberán limpiar las zonas de carga y descarga y las aceras.
Según figura en el documento, la figura del alcalde podrá dictar una orden de ejecución de cierre y limpieza de parcelas en el caso de que un propietario incumpla su deber de conservación. Para ello, además, establece unos valores en los casos de ejecuciones subsidiarias. El incumplimiento de la normativa contempla sanciones de 750 euros en los casos más leves. La multa asciende hasta los 1.500 euros en el caso de faltas graves mientras que alcanza los 3.000 en los muy graves.
