La Casa dels Canos de Sueca, donde convergen las acequias Mayor y de Múzquiz, acogió ayer el tradicional acto de la «suelta de aguas» que marca el inicio de la campaña agrícola del arroz. Los expertos auguran que la cosecha de este año será de gran calidad. El agua que inundará la extensa planicie que rodea l'Albufera está garantizada, aunque el estado de sequía que sufre el campo valenciano sigue siendo alarmante. Por eso, la apelación al uso racional de los escasos recursos hidráulicos existentes fue ayer un recurso constante en boca de políticos y regantes.
La secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García Rodríguez, aprovechó la visita para reunirse con los representantes de la Acequia Real del Xúquer y de la Comunidad de Regantes de Sueca. Rodríguez, subrayó que el Gobierno está impulsando el plan de «actuaciones prioritarias en la cuenca del Júcar para promover nuevos ahorros y modernizar la gestión del riego». La primera fase comprende una inversión de 18 millones de euros, a los que se sumarán otros 20 millones después. El plan beneficiará a casi 26.000 hectáreas y a 25.000 regantes, buena parte de ellos pertenecientes a la Comunidad de Regantes de Sueca. «Ya se han licitado las obras en los sectores 10 en L'Alcudia y 18 y 19 en Algemesí, por un importe conjunto de casi 5 millones y que esperamos puedan ser adjudicadas en breve», precisó
Rodríguez remarcó la necesidad «de hacer un esfuerzo por parte de todas las administraciones para dar un uso adecuado al agua y trabajar juntos para alcanzar un pacto nacional, con vocación de permanencia, que logre mejorar la gestión del agua, hacer un uso eficiente de la misma y cumplir los objetivos medioambientales».
«Desvestir santos»
El presidente de los regantes suecanos, José Pascual Fortea reivindicó el papel de los agricultores de l'Albufera frente a un escenario complejo: los efectos derivados del canbio climático y la sequía producida por la escasez de los recursos y las demandas que conducen al déficit hídrico, por lo que reclamó «prudencia y sentido común en el contexto del Pacto Nacional del Agua». Y advirtió: «Los aroceros del Xúquer queremos seguir siéndolo sin interferencias de cuencas ajenas y por eso he de insistir en la prudencia ante cualquier modificación de los planes hidrológicos. En eso nos va la vida». Respecto a los trasvases, Fortea quiso dejar claro «que lo que no hay que hacer es desvestir a un santo para vestir a otro».
El presidente de la Diputación Jorge Rodríguez apostó por un «reparto del agua que sea equitativo y sirva para conservar un ecosistema tan importante como el Parque Natural de l'Albufera». El dirigente también avanzó que el plan contra la sequía de la Diputació dispondrá de 2 millones de euros más provenientes del superávit, con lo que alcanzará los 6.200.000 euros, que se destinarán a «actuaciones de reparación y mejora de las redes de depósito y suministro de agua de los municipios valencianos».
