Oliva es, de lejos, la ciudad de más difícil gobernabilidad de toda la comarca tras las elecciones del pasado domingo. Sin embargo, ha bastado un día para empezar a despejar algunas dudas entre una ensalada de seis partidos con posibilidad de formar parte del Ejecutivo local.
En realidad, existen dos posibilidades bien definidas. Por una parte, que la ganadora de los comicios, Chelo Escrivá, gobierne en minoría tratando de negociar algún pacto puntual con el resto de formaciones.
El otro bloque es el que encabezaría David González, candidato de Compromís, que, como segunda fuerza más votada, ha anunciado que va a tomar la iniciativa para tratar de cerrar un gobierno local que impida al PP llevar las riendas de la ciudad y que, como es lógico, él aspira a liderar. Para ello, el nacionalista debe sentarse y convencer a Projecte Ciutadans d'Oliva, EUPV y Gent d'Oliva, una tarea que no será nada sencilla.
En realidad, quien ha allanado el camino para que una de estas dos opciones se produzcan es Carlos Mengual. El candidato del PSOE confirmó ayer a Levante-EMV lo que viene diciendo desde el día que anunció que se presentaba, que la formación que encabeza no pactará con ningún partido, por lo que renuncia a formar parte del gobierno y será oposición a partir del próximo mes de junio. «Siempre dije que fuera cual fuera el resultado no pactaríamos y así será».
Mengual cree que es «lo más justo» porque «es lo que ha decido el pueblo». Asegura que no tendría sentido dar su apoyo a otra formación para gobernar porque «no creo en los proyectos que se han presentado en estas elecciones».
Por su parte, David González, confirmó que su intención es la de tomar la iniciativa para «propiciar» la creación de un gobierno para la ciudad. Pretende, dice, «evitar el error cometido hace cuatro años de permitir que el PP de Chelo Escrivá accediera a la alcaldía».
Respecto a esto, Blai Peiró, candidato de Projecte Ciutadans d'Oliva, que tiene cuatro concejales, también se mostró abierto a «hablar y negociar con todas las formaciones políticas» porque, a su entender, «los ciudadanos, con sus votos, han pedido a los políticos que dialoguen para solucionar sus problemas».
La ganadora de los comicios, Chelo Escrivà, candidata del PP, también se postuló como futura alcaldesa. Reconoce que tiene muy difícil un pacto de gobierno, aunque no descarta lograr acuerdos «puntuales» e incluso ofrecer delegaciones a otros concejales porque «tal como está la situación tenemos que arrimar todos el hombro por Oliva».
