El concejal de EUPV en el Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna, Eduardo Bononad, ha renunciado a todas las asignaciones que le corresponden por su puesto. Entre ellas se encuentran la asistencia a los plenos, 230 euros, las juntas de portavoces, valoradas en 200 o la de otros órganos colegiados y comisiones, en 100. El concejal recordó que «ya comenté en campaña que no iba a percibir ningún sueldo de este ayuntamiento y lo mantengo».
Otra cosa es la asignación que el ayuntamiento da a los grupos políticos, esto es, 350 euros más 50 euros por edil. Como que actualmente EUPV tiene solo un concejal, Bononad no ha renunciado a los 400 euros mensuales que «voy a entregar al partido. Venimos de cuatro años en los que Karina Vercher no dio ningún euro al partido mientras nos representaba por lo que es necesaria esta aportación al colectivo», dijo.
Críticas del PSPV
Por su parte, desde el PSPV, criticaron ayer que el nuevo Gobierno local de Compromís haya aumentado la asignación por asistencia a junta de portavoces y de gobierno, algo que se debe, aseguran, a que el alcalde, Jordi Juan, al no poder cobrar del consistorio por disponer de sueldo de diputado, quiere aprovecharlo para obtener más ingresos. También denunciaron el aumento de la partida para el jefe de prensa, aún no nombrado, una figura que, recordaron, desapareció a final de la pasada legislatura «y se demostró que no hacía falta porque las información llegaba igual a los medios.
