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El nuevo Gobierno de Gandia acaba con el 9 d'Octubre que impulsó el PP

El concejal de Cultura, Joan Muñoz, adelanta que, «para evitar enfrentamientos» no habrá ni pleno institucional ni la «baixada de la senyera» que el exalcalde Torró copió del Ayuntamiento de Valencia

El nuevo Gobierno de Gandia acaba con el 9 d'Octubre que impulsó el PP

El Gobierno local de Gandia, formado por el PSPV-PSOE y la coalición Compromís, ha decidido poner fin al modelo de celebración del 9 d'Octubre que el PP impuso, sin consenso, en la pasada legislatura. El exalcalde del PP, que en los cuatro años tampoco logró unir a todos los partidos políticos y evitar enfrentamientos a cuenta de la identidad y los símbolos de la Comunitat Valenciana, copió los actos que, secularmente, se celebran en la ciudad de Valencia. Es decir, la «baixada de la senyera» desde el balcón del ayuntamiento, seguida de procesión cívica hasta la plaza del Rei Jaume I y ofrenda floral al monolito que recuerda al conqueridor. Previamente, tenía lugar un pleno institucional que durante la pasada legislatura solo generó enfrentamientos.

El punto álgido de esas diferencias llegó cuando el exalcalde del PP se inventó un manifiesto de «valencianía» cuyo documento se situaba en el centro del salón de sesiones durante el pleno institucional para que, uno a uno, todos los concejales se levantaran y lo firmaran. El manifiesto, que no había sido consensuado, respondía a los principios del PP sobre el valencianismo, lo que indignó a los dos partidos de la posición hasta el punto de ausentarse de ese acto y dejar en solitario a los representantes del PP. El año pasado en la polémica incluso se vio envuelta la Federació de Falles de Gandia.

Ayer, a preguntas de este periódico, el concejal de Cultura, Joan Muñoz, señaló que aún se está negociando para intentar programar una celebración del 9 d'Octubre que no sirva para poner de manifiesto los enfrentamientos, sino que contribuya «a unir a todos los valencianos», sea cual sea su opinión sobre los siempre espinosos asuntos de su identidad y, sobre todo, sus símbolos.

Lo que dejó claro Muñoz es que el nuevo Gobierno local ya ha decidido proponer que no se celebre el pleno institucional «para evitar enfrentamientos», y que también se anule la «baixada de la senyera» mientras suena el himno de España y se disparan salvas de honor, un modelo que el PP impuso hace cuatro años en solitario gracias a su mayoría absoluta.

El concejal de Cultura indicó que se está trabajando para organizar un 9 d'Octubre «inclusivo y no excluyente», y que la voluntad del Gobierno local es convertir el Día de la Comunitat Valenciana «en una jornada donde todas las sensibilidades tengan cabida».

El modelo del nuevo 9 d'Octubre institucional de Gandia se abordará próximamente en una reunión con representantes de todos los partidos, pero Joan Muñoz ya lanzó un mensaje claro con el fin de evitar discrepancias. «Todos deberemos ceder un poco para llegar al consenso en un día de debe ser la fiesta de todos los valencianos».

El PP y la «Catalunya Sud»

Ese espíritu de buscar la unidad no parece que vaya a producirse. De hecho el PP ya se ha adelantado con la presentación una moción para ser debatida en el pleno en la que solicita mantener los actos del 9 d'Octubre como en la anterior legislatura.

La moción incluso pide una declaración de «autodefensa» y que se rechacen las declaraciones del conseller catalán de Justicia, Germà Gordó, que abogó por dejar abierta la posibilidad de ofrecer la nacionalidad catalana a valencianos y baleares que lo deseen en el caso de una hipotética independencia de Cataluña.

«Sufrimos otro intento de imposición de una idea minoritaria: la de los Països Catalans que absorbirían a la Comunitat Valenciana bajo la denominación de Catalunya Sud o de País Valenciano», indica la moción del PP.

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