El Ayuntamiento de Gandia cortó ayer uno de los árboles situados en la calle del Tossal, cuyas obras de remodelación están en su fase final, al presentar riesgo de caída en una zona peatonal habitualmente frecuentada por niños.
La medida fue aprobada por los servicios técnicos municipales después de comprobar que parte del tronco se encontraba carcomido y que eso hacía peligrar su estabilidad en el caso de que se produzcan un viento intenso.
El concejal de Medio Ambiente, Xavier Ródenas, señaló que solo en esos casos se autoriza el corte de árboles en Gandia, dado que su departamento ha dado instrucción de preservar todos los ejemplares.
El árbol abatido ayer será sustituido por otro en el momento en que el alcorque que ha quedado vacío lo permita.